Thursday, March 31, 2011

malos muchachos con buenas razones y buenos muchachos con malas razones


Día de la independencia, malos muchachos buenas razones o buenos muchachos malas razones.
En distintos lugares en distintos tiempos tipos diferentes resultados diferentes, ni mejores ni peores, diferentes, buscando lo mismo en lugares diferentes en tiempos diferentes tipos distintos resultados distintos.
Unos se independizaron de tipos que no eran independientes, la madre patria estaba entonces ocupada por los franceses y a los franceses les interesaba un comino de los que se declaraban independientes de los ibéricos que por eso pasaron de lacayos, de todos modos en donde estuvieron el día que estuvieron lo dijeron entre otros Laprida y Pueyrredón, uno leguleyo de profesión y un político itinerante, el otro un comerciante aristócrata y un militar, más partidarios de los matasiete unitarios que de los rojos federales, los Representantes del pueblo de la Confederación Argentina, cuando hubiera bastado con el pueblo sin la remota sugerencia del pueblo dependiendo de una confederación que no existió, reunidos en Congreso General Constituyente por voluntad y elección de las Provincias que la componen, otra remota mención cuando las provincias apenas se comenzaban a componer a sí mismas, en cumplimiento de pactos preexistentes, pactos que no se cumplen no son pactos que valen y si no valen son pactos que no sirven, con el objeto de constituir la unión nacional, cual unión nacional, afianzar la justicia, más justicia menos justicia para otros, consolidar la paz interior, de un interior en el que se derrama sangre o se pelean presupuestos, proveer á la defensa común, cuál defensa, promover el bienestar general, cuál bienestar, y asegurar los beneficios de la libertad para nosotros, para nuestra posteridad, y para todos los vivos del mundo que quieran habitar el suelo argentino, todos los que quisieran, invocando la protección de Dios, fuente de toda razón y justicia.
No fueron ni buenos ni malos solo dos muchachos peleando por lo suyo en los comercios y en la política todos los negocios son parecidos, o diferentes si se los mira de otra forma, buenos muchachos malas razones, así que ellos por esos años de mil ochocientos dieciséis cuando anduvieron por Tucumán, no supieron bien ni lo que buscaban ni a quién ni qué representaban, pero fueron más unitarios que federales, enemigos de los españoles los hombrecitos pusieron lo que tuvieron cuando declararon la independencia.
Los otros se independizaron de un imperio que los volvía locos a exacciones, se declararon rebeldes renegando de los impuestos al timbre y al té, a puras cargas de pólvoras peleando hombre a hombre, en contra de tipos que en sus lugares eran independientes y avivados viviendo del laburo de los colonos en sus colonias, lo dijeron entre otros Jefferson y Franklin, uno un buscavidas un inventor y el otro un aristócrata inquieto, los representantes de los Estados Unidos de América, reunidos en Congreso General, acudimos al juez supremo del mundo para hacerle testigo de la rectitud de nuestras intenciones. En el nombre y con el poder pleno del buen pueblo de estas colonias, un pueblo sin una confederación inexistente, damos a conocer solemnemente y declaramos que estas colonias unidas son y por derecho han de ser Estados libres e independientes, simples palabras pocas palabras mucha sustancia; que están exentas de todo deber de súbditos para con la Corona británica y que queda completamente rota toda conexión política entre ellas y el Estado de la Gran Bretaña, y que, como Estados libres e independientes, poseen pleno poder para hacer la guerra, concertar la paz, anudar relaciones comerciales y todos los demás actos y cosas que los Estados independientes pueden hacer por derecho.
No fueron ni buenos ni malos, diferentes, solo dos muchachos peleando por lo suyo en los comercios y en la política todos los negocios son parecidos, o diferentes si se los mira de otra forma, malos muchachos buenas razones, así que ellos por esos años de mil setecientos setenta y seis cuando anduvieron por Filadelfia no supieron bien ni lo que buscaban ni qué representaban, pero fueron más federales que unitarios, y más enemigos que amigos de los ingleses los hombrecitos pusieron lo que tuvieron cuando declararon la independencia.

Wednesday, March 30, 2011

versión libre de biografía no autorizada por presuntos expertos ni por ninguna de sus corporaciones

Lejos bien lejos de la patria módica por cronopios y famas cabrones, versión libre de una vida en la red a resguardo de autoproclamados historiadores autorizados y corporaciones correspondientes.
Se habrá muerto preguntando como otros como muchos de una patria desagradecida el cabezudo, de porfiado y cantimpla que fuera, de callado de tozudo que fuera se habrá muerto preguntando qué más es lo que hay que dar para que a uno lo tomen en cuenta, qué más es lo que hay que dar a toda esa manga de candongos, de camaleones y astutos de chismosos y cagones que se llenan la boca diciendo que hacen y defienden la patria que son ellos mismos, cuando si lo son ellos mismos entonces se trata de una patria desagradecida cuando se ha dado la vida acomodando sus quilombos, nadie aparece a dar las gracias y si descubren un resquicio andan todos tratando de aprovecharlo para clavar un puñal a quien sea y por la espalda, triste y preguntando habrá muerto en su exilio solitario, considerando teniendo en cuenta ese desbalanceado balance, entre lo que dio y lo que le quitaron.
Esos calzonazos convenidos, patricios consentidos y convertidos y conversos que no dudan cuando tienen que cambiar de banderas, como si ellos lo hubieran sabido todo desde el principio, como si ellos no hubieran andando cambiando de colores con la ocasión, como si fueran distintos a él que tuvo que vivir tratando de hacer los equilibrios, entre los bochinches de Liniers y los celos del marote Saavedra en los días de la revolución que terminó de planearse en su propia casa, como si hubiera que demostrarle algo a algunos de esos cabrones que después andan con intrigas a las espaldas de cualquiera porque no quieren a nadie, hieden como catinga, cambian de lealtades cambian de subordinaciones y después atacan a otros por lo mismo que ellos critican, como si las cosas fueran claras en todos estos candombes, qué más hay que dar.
Se habrá muerto inventariando los ingentes servicios prestados en sesenta y nueve años que son muchos, no para cobrarlos porque tamaña cantidad de años sirven también para el olvido, nadie se acuerda de los viejos y con ellos es como que todos quisieran perder la memoria, no por eso de cobrar sino para rumiar el descarte de las viejas rencillas y las broncas y los enfrentamientos de toda laya, los combates con los portugueses para correrlos a la banda oriental, los combates con los ingleses para la recuperación del Retiro, la defensa en el colegio San Carlos, la resistencia en la calle del Correo, la organización de los patricios, las diputaciones, el haberse hecho cargo de varias administraciones de gobierno acá en el litoral o adónde lo asignaran, se habrá ido contando los beneficios del Pacto de Santo Tomé para una federación que nunca existió, para una federación que existió como tema de conversación en las tertulias pero nunca en la práctica, que otros supuestamente anduvieron defendiendo con la palabra pero que él unitario indirectamente defendió por preservar otros valores a fuerza de temperamento y de luchas, como fuera civilista de espada a la cintura y no un militar de sable en mano como de él dijeron algunos, que impuso las leyes del matrimonio no católico la regularización del tráfico de esclavos, y que peló con insistencia la pensión que nunca recibió una de las niñas de Vilcapugio y Ayohuma la capitana convertida en indigente Remedios del Valle.
Contando como si lo estuvieran escuchando los cagones, del bochinche en la quebrada de Yuraicoragua, en esa larga discusión que hicieron los jefes con el tema de las broncas acumuladas con el disfraz del armisticio, para que todo terminara en nada más que una derrota casi vergonzosa de la que nadie se hizo cargo o de la que en parte lo hicieron cargo a él, justo el general entre todos que resistieron hasta el final en Huaqui, allá en el río Desaguadero cuando se dirimían límites de virreinatos importantes pero antes que otras cosas las riquezas de esos virreinatos, evitando el riesgo inútil de la superioridad numérica agrupar a los soldados y replegarse con tino, se habrá muerto preguntando como otros como muchos de una patria desagradecida el cabezudo, de esa patria con patriotas que acusan siempre mientras no sean los acusados, de una patria adonde parece que cuesta mirar las ganancias en las pérdidas, medir las pérdidas en las ganancias, qué más es lo que hay que dar a toda esa manga de candongos, de camaleones y astutos de chismosos y cagones que se llenan la boca diciendo que hacen y defienden la patria que son ellos mismos, que más es lo que hay que dar él que dio hasta su hijo Avelino que degolló el Restaurador.
Se habrá muerto preguntando de una patria módica este Coronel de la nación don Juan José Viamonte, que se debe haber cansado de bailar el minué con la más fea.

Tuesday, March 29, 2011

bailecitos durante la colonia, coloniaje libertinaje y traiciones

Gato del escondido en las guerras de los chismes.
Como en Desamaría la samaritana lleva el cántaro a su fuente pero no es agua viva y cristalina lo que lleva y trae sino vino bueno cuanto puede, si no es vino algún brebaje o bebida espirituosa que afloja temperamentos y genios, va y viene entre godos y patricios en el baile del descanso, entre reclutas y civiles dando las vueltas del gato del escondido, escondiendo a unos lo que se muestra a otros, mostrando a unos lo que se esconde a otros entre avances y zapateos, entre mestizos gringos y unos pocos mulatos las guerras y las guerrillas se van ganando o perdiendo, la gentil dama graciosa y agraciada se esconde y se muestra donosa en las esquinas del patio y cubre su cara con un pañuelo de Asturias, como en Desamaría en los fortines del general Joaquín de la Pezuela después de Vilcapugio y Ayohuma, la hija de samaria lleva el cántaro a la fuente de su señor que no es el Señor sino Martín Miguel el de las milicias de los gauchos.
No es agua viva y cristalina lo que lleva, es comida y es bebida y lo que pueda pasando por sirvienta de los señores oficiales, aunque sucia y mugrienta es bella por sus pocos años, lleva el cántaro a su fuente mientras escucha lo que luego repite y anota, es la información la fuente la inquisición que se desmenuza, como se desgrana el choclo usado como un abalorio que le sirve para contar ausentes y presentes, es su memoria su cántaro en la revista de los cuarteles, mientras paciente se pasa juntando los granos en bolsas diferentes, rara fuente raro cántaro por lo que reniega Pezuela que dice los gauchos nos hacen casi con impunidad una guerra lenta pero fatigosa y perjudicial, a todo esto se agrega otra no menos perjudicial que es la de ser avisados por horas de nuestros movimientos y proyectos por medio de los habitantes de estas estancias y principalmente de las mujeres, cada una de ellas es una espía vigilante y puntual para transmitir las ocurrencias más diminutas de éste Ejército, dice y sospecha, como en Desamaría la samaritana lleva el cántaro a su fuente, las guerras se hacen también con palabras con proclamaciones y omisiones.
Como allá la buena samaritana señora y patricia la dama que fue mejor salteña, María Loreto Sánchez Peón, mujer de Pedro José Frías Castellanos nativo de San Carlos que perdió una pierna en la batalla de Tucumán, lleva el cántaro a su fuente cuando vende pan pasteles y alfajores a la gente del ejército realista, dando vueltas y vueltas como en el gato del escondido para tomar y pasar información al coronel Luis Burela, no es agua viva y cristalina lo que lleva y trae, sino vino bueno cuanto puede, si no es vino algún brebaje o bebida espirituosa que afloja temperamentos y genios y más que nada la lengua de los que hablan por unas cuantas monedas, va y viene entre godos y patricios en el baile del descanso, escuchando chismes de poca monta cuando hay tregua en la pelea, recogiendo información crucial en las batallas, patrañas y embustes y franquezas, ella deja notas en el hueco de un árbol a orillas del río Arias, donde sus criadas yendo y viviendo con la excusa del lavado de la ropa, dejan los mensajes y retiran instrucciones mientras caminan y cantan por las orillas del río para el lavado de la ropa o para conducir el agua para el servicio doméstico, la salteña lleva el cántaro a la fuente de su señor que no es el Señor sino Martín Miguel el de las milicias de gauchos a quien le sirven las palabras, palabras sueltas o frases en los papeles y también en el ruedo de su pollera, ella bien sabe que las guerras se ganan y se pierden con la cantidad de soldados y de armas, pero también con los secretos las astucias y las perfidias.

Monday, March 28, 2011

barbaries que son barbaridades de la civilización bárbara distinta a las del fama sarmiento

Civilización y barbarie.
¿Qué es la civilización mí querido Faustino?
¿Acaso el comportamiento atildado, acaso las formas refinadas?, ¿acaso es establecer el precio de las cosas en los mercados?, ¿leer tal vez, comerciar con valores morales antes que con valores utilitaristas o viceversa?, ¿qué son unos para otros y qué son otros para uno?, ¿es acaso la civilización la pretensión del conocimiento?, ¿una ópera tal vez una sinfonía un concierto?, ¿acaso es la acumulación de conocimiento?, ¿las instrucciones científicas que explican la disposición del universo y todas sus disposiciones complementarias?, ¿es la ilustración tal vez el renacimiento?, ¿acaso es el reconocimiento de los derechos naturales o aún más de los derechos absolutos como la libertad, como la igualdad, como la propiedad, como la seguridad?, ¿reconocer esas entidades en otros tal vez superar inconfesables y miserables prejuicios? O tal vez civilización es ¿reconocer las estrofas de una poesía?, ¿interpretar los mensajes de los silencios o los ecos de los gritos en los cerros de Surimana?, ¿arrancar las contraseñas de un triste silbar de los vientos en Tungasuca o del sonido parejo del agua en los arroyos de Pampamarca?
Querrán volarlo y no podrán volarlo.
Querrán romperlo y no podrán romperlo.
Querrán matarlo y no podrán matarlo.
¿Qué es la barbarie mí querido Faustino?
¿Acaso la libertad en estado natural o las bulas que vienen del imperio sin acentos y sin diptongos?, ¿tal vez el equilibrio entre el hombre y la naturaleza sin interferencias ni intermediarios?, ¿acaso no aceptar valores ajenos, pedir por la igualdad cuando se percibe la injusticia resistir en Vilcabamba?, ¿acaso interpretar diferente el ceremonial y el protocolo? ¿acaso establecer el valor de las cosas y no sus precios en los mercados?, ¿ser analfabeto tal vez aunque honesto o alfabeto y deshonesto?, ¿acaso es entrenar a los chunchos para defender el imperio del otro imperio?, ¿es reclamar lo que no se repartió por los mercados aunque eso signifique la delincuencia?, ¿el conocimiento propio y el natural tal vez?, ¿acaso es interpretar distinto el derecho a la propiedad sin que se respete la propia interpretación?, ¿acaso es reaccionar ante la delincuencia de los que se proclaman a sí mismos civilizados?, ¿acaso una sinfonía autóctona, luchar por los derechos que se tuvieron siempre?, ¿sublevarse tal vez sin posibilidad de revisar los motivos?, ¿reaccionar ante la violación el desamparo el despojo? ¿O tal vez barbarie es pensar distinto que el corregidor contra su justicia mayor y su lugar de lugarteniente de capitán general, alzarse contra el conde de Chinchón, reclamar con unas cuantas palabras?
Querrán descuartizarlo, triturarlo,
Mancharlo, pisotearlo, desalmarlo.
Querrán volarlo y no podrán volarlo.
Porque en tiempos de la guerra de los siete años entre Portugal y España, José Gabriel Condorcanqui fue civilizado, después de ser civilizado el bárbaro indio se rebeló por adentro, después de ser un culto y delicado alumno del colegio San Francisco de Borja, otrora un niño como todos vestido de verde y las insignias del colegio en tafetán colorado, civilizado para interrumpir civilizaciones aunque a lo que hizo después le hayan llamado barbarie, barbarizado para interrumpir aberraciones, solamente en una lucha de dos imperios en la dominación española, civilizado fue y reconoció la autoridad de la Corona, anduvo por ahí diciendo que su intención no era ir en contra del rey sino en contra del «mal gobierno» de los corregidores, demasiados y cambiantes intendentes que mataron en nombre de reyes que no los autorizaron, para trasladar la riqueza y controlar a unos cuantos indios, bárbaro fue llamado por sus rebeliones con el apoyo de otros curacas, de mestizos bien nacidos y algunos criollos, andando por abolición tanto del reparto como de la alcabala, la aduana y la mita del Potosí.
Porque en esos tiempos los otros los que hablaron de la civilización fueron la barbarie, y en especial ese 18 de mayo de 1781, en la Plaza de Armas del Cusco esos que portaron la Biblia y sus manos y la sífilis donde ya se sabe, Tupac Amaru II penúltimo cacique rebelde fue obligado, tal y como señalaba la sentencia, a presenciar la ejecución de toda su familia, porque después de pasar por la barbarie los de la civilización de ese imperio lejano lo destrozaron cuanto pudieron por adentro y por afuera, por adentro y en su presencia ejecutaron a sus aliados y amigos, a su esposa y a sus dos hijos, en ese orden, por afuera le cortaron la lengua, fue torturado para arrancarle información acerca de sus compañeros de rebelión, infructuosamente, se le intentó descuartizar vivo atando cada una de sus extremidades a sendos caballos, de manera inútil, por lo que finalmente se optó por decapitarlo y posteriormente despedazarlo, se le dislocaron brazos y las piernas junto con la pelvis, su cabeza fue colocada en una lanza exhibida en Cuzco y Tinta, sus brazos en Tungasuca y Carabaya, y sus piernas en Livitaca y en Santa Rosa.
Mancharlo, pisotearlo, desalmarlo.
Querrán volarlo y no podrán volarlo.
Dos caras de una moneda, la civilización la barbarie.

Sunday, March 27, 2011

trabalenguas, grato patriota de ingrata patria paria el cronopio paria la cronopiada

Trabalenguas, grato patriota para patria ingrata, paria el patriota paria la patria.
No pudo escuchar Tomás que le dijeran Tomasito, no pudo tener la sensación de una mano movida por la ternura revolviendo sus cabellos, sus padres partieron pronto y lo dejaron solitario, a merced de la venturas de tíos amigables que contaban cuentos de Trafalgar y de otras historias del mar y de marinos, de parientes políticos de vecinos que se apenaron con él cuando él ni siquiera supo de penas, parientes y vecinos que contaron de barba roja y de barba negra mezclas de héroes y de villanos, pero sin dudas eso forjó su temperamento de emprendedor y corajudo, condición de muchos paisanos de alrededor de los corrales del Alto por el año de mil ochocientos, cuando los cuentos de aventuras abrigaban igual que el calor de los fogones.
Así que amparado en las gracias de la virgencita de los Dolores patrona del lugar donde nació su padre, justo él y justo esa sublime madre de todos los que tienen malestares de angustias que en toda la vida se llevan como una puntada en el pecho, y por la virgen de Guadalupe por parte de su madre, se lanzó de jovencito a la aventura de andar haciendo patria, patria de los patriotas condecorados, patria de compatriotas ingratos, dulce niño que entonces tampoco supo saber muy bien de terruños y banderas, pero sí de bríos de arrojos y oportunidades con el invasor por afuera.
Empezó como grumete en la corbeta Halcón, como uno más en cientos de soldados en respaldo de operaciones en tierra, como un bisoño y entusiasta marinero a las órdenes del capitán Bouchard y del almirante Brown en la campaña del Pacífico, pertinaz navegante por los mares circunvalando la tierra, la patria no se toca es una idea es un intangible, una patria de compatriotas ingratos pero también una patria de gratos compatriotas, las batallas se sufren en carne propia, y eso sí se toca en docenas de cicatrices que quedan por todo el cuerpo, cumplidor sagaz de las ordenes pasando de pilotín a teniente, de comedido y de conocedor de los amarres y de los mástiles a dar instrucciones más generales.
Y en su corta vida fue entendiendo don Tomás, ese Tomasito curtido, paria el patriota en paria patria, el sentido de dar sin pedir a cambio nada, de entregar sin condiciones de no ceder si no fuera con la muerte, lobo de mar testarudo y subordinado, sargento mayor en el combate de Los Pozos, comandante en las rencillas contra Brasil, comandante de corbeta en las contiendas de Quilmes y Puente Lara, escenarios donde otros lo recuerdan gritando "solo los cobardes se rinden sin pelear, y aquí no reconozco sino argentinos y republicanos, compañeros: arrimen las mechas y ¡Viva la Patria!"
Marino don Tomás Espora, patriota de una patria de patriotas condecorados donde los que deben acordarse se olvidan fácil de los patriotas que juegan el pellejo, prolijo y circunspecto, padre radiante de la familia que armó con María del Carmen Chiclana, comandante de goleta, teniente coronel, comandante general de la marina, héroe de una patria sin héroes, niño castigado por adentro y por afuera nauta completo, grato patriota de una ingrata patria, paria el patriota paria la patria.

Saturday, March 26, 2011

cronopios niños con cargas de adultos, cronopios adultos con corazones de niños

Crónicas de chicos grandes crónicas de grandes chicos.
Cadetes fueron colegiales y majaderos, juguetones y aprendices, estudiantes de Salamanca, apenas niños inmovilizados por rigurosas disciplinas apenas adolescentes que asimilaron historias desordenadas de imperios legados y de combates, chicos grandes nativos y letrados de la américa temprana devastada por la corona saqueada por las traiciones, grandes chicos uno de Arequipa y el otro de Buenos Aires, virtuosos alférez y doctos fueron a sus tiempos en batallas ajenas, uno en Rosellón el otro con los vocales del Consulado por el comercio de la nobleza, y juntos varias veces juntaron sueños de grandeza juntando fuerzas y penas.
Generales fueron en sus terruños y en sus tiempos, lozanos compinches en España y en Buenos Aires, comandantes de sus ejércitos supremos, grandes chicos de tan caballerosos caballeros, chicos grandes jugando a ser coroneles y mayores de sus propios ejércitos, como antojadizos templarios de los ejércitos de sus patrias de los ejércitos de sus madres patrias, uno por mandato de los realistas el otro por los mandatos de las juntas por la independencia, chicos grandes y soñadores, brigadieres y generales de docenas de contiendas que andando sus días fueron dibujando el mapa de una emancipación incompleta, de españoles y de ingleses, y de las cadenas propias invisibles cadenas de la obsecuencia de algunos mercenarios falsos patriotas de las ideas.
Defensores de sus sueños soñadores de sueños diferentes lucharon hasta el cansancio defendiendo sueños propios y ajenos hasta que en Tucumán se encontraron, chicos grandes los generales en ese veinticuatro de setiembre del año del Señor de mil ochocientos doce, grandes chicos que ni vencieron ni capitularon, encerronas de sus defensas en sus sueños encontrados, en sus ofensivas después de guerrear y de penurias de andar peleando y soñando, paridades en combates de chicos grandes que juegan un año después y en Salta, comenzaron con rendiciones y el desarme.
Cartas de amigos juguetones fueron en los correos que se cruzaron, la del peruano que le escribió “Campamento del Ejército Grande” y la del argentino que le contestó desde el “Cuartel del Ejército Chico”, cruces de bromas en misivas y señales.
Chicos grandes, grandes chicos los generales, Juan Pío de Tristán Y Moscoso el tío sin cara de europeo con toda la agilidad del habitante de la cordillera, y Manuel Belgrano el creador de la bandera a la vera del Juramento.

Friday, March 25, 2011

cronopio que bisbisea es cronopio chismoso

En Babia anda el cronopio bisbiseando, susurros son de pasados años chismes que se van perdiendo.
Él anda siempre en Babia armando sus relatos como si fuera un arquitecto palabra por palabra, desde niño Domingo escribe y escribe desde que partió a Sevilla, siempre se lo ve trabajando como si fueran ladrillos las palabras de sus fábulas, no sabe bien cuántos las leen en el telégrafo mercantil, el periódico de más tirada, pero él se divierte buscando referencias similitudes entre la vida instintiva de los animales y la vida un poco más racional de esa gente que lo rodea.
Este Azcuénaga no es amigo de lo que hace su hermano metiéndose con esos de la primera junta, no entiende demasiado bien lo que quieren hacer adónde quieren llegar, si lo mismo se puede hacer sin clavarse con tantas peleas, no se mete con lo que hace Clarita de Núñez y Chavarría esa dama engreída y tan movediza que ha desposado, se creerá que puede todo porque su padre es el escribano del cabildo si él también es letrado, le molesta aunque no se lo dice, le duele que ella no acepte sus encomiendas de no meterse con los problemas de la política que se mezclan siempre con los de alcoba y de guerras intestinas, que ande apañando rebeldes realistas en días de revueltas, no se mete con ella y desaprueba todo lo que ella organiza como reuniones sociales que son la comidilla en toda la aldea hay malignos que dicen que lo engaña con algunos de esos gringos matreros soldados.
No se mete con su hermano ni su mujer con eso logra que ella tampoco se meta con su trabajo de escritor que anda dejando testimonio, Domingo es un poeta y además un patriota como su hermano y prefiere a los criollos sean paisanos o generales como el vivo de San Martín que dio parte de enfermo para no andar por Sipe – Sipe y se fue como dicen que se retiró Guemes volviendo a su Salta, no es cuestión de andar perdiendo el Cuzco ni nada, no es amigo de muchas de estas cuestiones pero sin embargo las deja registradas como esa batalla en la que Rondeau dejó definitivamente el alto Perú en manos de los realistas aunque tuvo oficiales valientes en sus filas, pues si son ingratas, para reprehenderlas las Cotorras bastan.
Que nuestra causa es santa y muy sagrada, Ios prensistas lo escriben á porfía, Y si no hace milagros todavía. Depende de no estar canonizada: Si paramos la vista en la jomada De Sipe-Sipe, que se lee en el día, Veremos la congoja que tenía El Gobierno en su mente recatada: Los refuerzos que envía son muy buenos. Mas ya van tarde, porque está el sistema Sino en las agonías, cuando menos Aparejado con su unión extrema; Con que digamos con angustia tanta. Que, el diablo se llevó la Causa Santa, escribió el abogado.

Thursday, March 24, 2011

alférez imparable capitán de emancipaciones mariscal de las miserias el cronopio

Alférez montaraz capitán en los andes mariscal de los peruanos el cronopio, ese amanecer de mayo de mil ochocientos cuarenta y dos recordó cuando de niño, hijo de patricios bien criado siempre un patricio aunque estuviera quebrado, recordó cómo entonces le gustaba escuchar las historias de la guerra de las alcalabas, sentarse en rondas de mayores para escuchar de la escaramuza pueblerina que quedó en la memoria de todos por la imposición de ese odioso impuesto, nobles indignados como él patricios enojados los huarasinos hijos del imperio de Nazca, cómo le gustaba escuchar los comentarios de los vericuetos de una pelea que mucho después comprendió se armó porque los reyes impusieron esa contribución desde lejos para pagar otras guerras en otros lados también muy lejos, allende el océano.
Ese amanecer no fue común, de un solo golpe recordó su infancia cómoda en un pedazo de cordillera con nevados blancos a la vera del pacífico, donde pasó los mejores momentos de su vida y aprendió de lealtades de soldado, de un solo golpe se acordó de su juventud puntillosa y soberbia asistiendo a nobles y virreyes en la Real Audiencia de Quito, de su madurez de duras guerras al lado del general argentino que recio andaba emancipando pueblos, recordó los retiros los desplantes los malos negocios las estafas de conocidos codiciosos, taciturno estuvo como si hubiera estado escrito en su destino que la aurora lo marcaría en esa lejana llegada y en esta súbita partida, y en la permanencia por el nombre quechua de su pueblo el waraq quyllur.
Ese amanecer de ese otoño fue distinto a todos los amaneceres que pasó, leal en otros tiempos en campañas disciplinado soldado de la libertad de los pueblos de América, los varones arreglan sus asuntos como varones caminó mascullando de un lado a otro, pasando las palmas de sus manos por la pana de su elegante traje de gala, como si con eso lo planchara o recuperara la refulgencia de un traje de tanto lustre, hijo de patricios hombre de bien patricio él aunque estuviera viejo y quebrado, alférez de artillería devenido en capitán por la asonada a los codiciosos ingleses, don Toribio de Luzuriaga Mariscal de la Orden del Sol de la República de Perú, esa madrugada tardía en su casa de La Dormida en el norte bonaerense, alba oscura y fresca recordó las glorias del pasado y la indiferencia de sus amigos más fantasmas que amigos, se sintió olvidado y viejo en días de luchas intestinas como la reciente batalla de San Cala y decidió pasar a la historia con un tiro en la cabeza.
En su escritorio quedó la fábula del águila el león y el loro de Domingo de Azcuénaga,
No hay duda en que sois
Por vuestros abuelos
De aves, y de brutos
Monarcas excelsos,
Pero, si tenéis
Tan perversos hechos,
Que el hurto y rapiña
Es vuestro elemento,
La grandeza vuestra,
Ni en chanzas la quiero,
Pues soy de dictamen
Por lo que penetro,
Que el lustre, y realce
De más alto precio
Es, el que uno adquiere
Por sí, siendo bueno.

Wednesday, March 23, 2011

manual del alumno donde los alumnos no son unos burros

Manual del alumno de donde ya sabemos del mismo lugar donde alguna vez funcionaron los resúmenes lerú y donde alguna vez se estudiaba.
Derecho a la prueba PISA SIN PRISA CON PAUSAS.

Definición de democracia: sistema con el que están bien los que GOBIERNAN y SUS conocidos los que no contradicen porque los que contradicen son enemigos, los que no están de acuerdo con esto se llaman dictadores o autócratas.

Sinónimo de democracia – nepotismo de los que pasan por el poder.

Libertad de prensa: permanencia y buenos negocios para los dueños de los diarios, las revistas, las emisoras de radio, los canales de TV de los que se encuentran en el poder, y la prensa que no entra en esta categoría es pro imperialista.

Yanqui: norteamericano que para los del poder tiene la culpa de todo lo mal que nos va, pero es el mismo personaje al que copian hasta la pose para cantar el himno, y al que los de ese mismo poder van a visitar a cada rato porque por adentro piensan que la libertad que cultiva allá en su tierra es la que quisieran tener pero que no tienen estos de necios, además piensan que en el país de ese yanqui están las mejores universidades la calidad de vida más preciada, resumen de yanqui, persona que se rechaza intelectualmente pero se copia en la práctica porque algunos parten para esa tierra cuando parten al exilio.

Libertad de expresión, libertad para MI expresión la del otro no me importa o la menoscabo.

Libertad de pensamiento: que los demás piensen exactamente lo que yo pienso.

Piquete: forma de protesta inventada por acá que consiste en privar de la libertad a otros con cortes de calles y otros canales de circulación o tránsito, porque la libertad del otro está donde comienza mi libertad pero también donde mi libertad termina, el derecho mío a protestar es más importante que el derecho de otros a transitar, primero YO después los demás.

Proceso de Reorganización Nacional: acciones llevadas a cabo por los extraterrestres, ah! y por los milicos.

Montonero sinónimo de mártir sinónimo de ángel sinónimo de patriota.

Ciudadano común sinónimo de pelotudo sinónimo de cautivo sinónimo de víctima.

Escrache: forma de protesta que consiste en tirar huevos y otros proyectiles en la fachada del edificio en el que vive el escrachado, además de hacer lo mismo en edificios públicos en vehículos de transporte público en monumentos y en todo otro tipo de propiedad privada o pública, forma de protesta en la que las personas destrozan bienes que utilizan PARA VIVIR O PARA TRABAJAR (ejemplo plazas o paseos públicos, trenes, subterráneos, etc.), palabra todavía resistida en la Real Academia Española (RAE).

RAE: unos nabos que ni saben los que somos por acá que somos cuarenta millones.

Tuesday, March 22, 2011

la leyenda del cacuy versión personalizada como con obligado

Leyenda del cacuy, de un cronopio escribiendo con el cronopio obligado, por donde Salta limita con Tucumán y Santiago, en la tarde o la siesta de golpe puede andar el cacuy cacuy, cantando triste el cantar para que alguien lo escuche pájaro hambriento será sino de un niño que también de lejos se oirá el que come y no convida tiene un sapo en la barriga, niño travieso será el changuito patapilas dirá yo comí y convidé el sapo lo tiene usted oeoe oeoe oeoe oeoe, por allá donde una uña se mete desde Bolivia a la patria mientras los de una melada tomaban mate y descanso dijo un payador porteño que andaba entre ellos buscando mieles también, no de abeja, sino de ensueños y encantos: "-finalizó la cosecha de la algarroba, ¡gran año! para alimento y remedio ¡qué invierno para la aloja será el invierno cercano! canto calmo y arcano el del cacuy olvidado, ya lo veréis, cuando haciéndose el gracioso venga Mayo, y, dando diente con diente, le siga Junio emponchado canta el payador entusiasmado, agua se me hace la boca de solamente pensarlo, chinita linda y despierta china del cantor letrado, irá a los bailes la prenda que está nombrada, pues callo, y he de soltarle al oído entre diciendo y besando: "-¡tomo y obligo!", y la niña ha de beber en mi jarro y ha de comer de mi plato, y ha de obligarme a su turno como a mi turno, con un mirar y un amago de esos que muestran el alma, chinita linda y despierta china del cantor letrado, dulce como la aloja como la aloja dulce y chispeando, de mi guitarra en la prima cantaré el sí de sus labios cantar de la china y un mate cantando como el cacuy en su rama; y al son de cuecas chilenas y de argentinos malambos, zapateando ¡haré volar la pollera de la princesa del pago, pañuelos vueltas y entreveros y entre las mozas, ninguna ha de pisarle el zapato mocitas de enaguas de dos colores mozas de dos amores, ni levantar sobre todas más polvareda en el rancho!" "-¡valiente moza es aquélla para meterla en fandangos!, bullas de baile y de canto carpa de los cantores, -le interrumpió un santiagueño, más que diciendo, cantando-, lo que es su padre cacuy, la cuida cacuy como reliquia de santo: y cuando baja a los montes, la deja allá, cacuy cacuy en su barranco, como las flores del aire pegada siempre al peñasco, como las flores del aire en su jardín se ha quedado, si no, ¿cuál de nosotros la ha visto?" -yo, entre mis cantos, que los cantores nacimos para entrever lo soñado, contesta el cantor con su canto sueño de soñar que estoy soñando sueño de cantor cantando, en cierta noche de luna mientras la andaba rondando, dice el cantor en sus estrofas de su aposento salían como gemidos muy largos, suspiros de cenicienta soplos de moza acalorada y desde entonces, librarla de su prisión he jurado", "-más sabe el diablo por viejo" que por su ciencia de diablo, -dijo un sargento de Güemes, Matusalén ignorado-; y así te digo, porteño que de viejo como olvidado es de ver lo que otros no vieran, cacuy cacuy que en la casa del barranco no hay tal mujer, ni tal padre, pues, lo que es ella, es un pájaro, y el hombre aquel, que allí mora y baja solo, es su hermano, saber de viejo octogenario saber de payador ordinario, ánima ya cacuy cacuy, porqué el pobre anda hace un siglo penando, almita de su alma para que el buen dios los asista; y los gemidos que oíste, no en su aposento, en un árbol, es la rama su casa son suspiros del cacuy que en la noche va a sollozar a su lado", "-sea mujer, y no importa que vista plumas o rasos, -dijo el cantor-, que las alas son de los seres más altos; vuela el cantor en su canta vuela la moza en su sueño y si es un ave, sin duda sabrá librarse del barro sueño por sueño, en el mundo quiero soñar con lo alado", "-cuando conozcas su historia, replicó al punto el anciano, has de romper tu guitarra, cantor sin guitarra payador sin argumento ¡y has de romperla llorando!, huérfanos ya, dos hermanos sin nadie en este mundo, ella un demonio, aunque linda y él poco menos que un santo el mozuelo trabajador sin abuela y emprendedor sin cansancio, cacuy cacuy hay que ser generoso y todo hay que compartirlo porque los buenos momentos hay que saber compartirlos y los amargados pueden cantarle, el que come y no convida tiene un sapo en la barriga yo comí y convidé el sapo lo tiene usted, canta el niño cuando el cantador se calla, así picaba carretas en Tucumán o Santiago, quebracho y monte por todos lados, en las llanuras era hombre de boleadoras y lazo, paisano recio y forajido como en los bosques de Salta un obrajero afamado; en Catamarca, minero más cateador que un riojano más santiagueño que aldeano; ¡y en las meladas, amigos! Esas meladas con picaduras nunca jamás se dio el caso de que perdiera una abeja entre esa mar de quebrachos, porque ¡tenía unos ojos para seguirlas volando y descubrir la colmena entre el cebil o el retamo!, cacuy cacuy siguiendo el canto en las copas en medio del follaje, cuanto hacía; lo hacía para tener con regalo a esa que tú, payador, llamas princesa del pago, llamas que se encienden en corazones solitarios y que era moza muy linda, pero en los hechos, gusano, cacuy cacuy el que come y no convida se enrosca como una boa, si él le traía un cabrito, ella en lo oculto iba a asarlo, asando lo que asaba se lo comía alimento que lo devoraba, y el resto echaba allá, a los Caranchos a las carroña antes que al ser humano; y él se iba hambriento peoncito maleable, afligido, para volver, en las manos trayendo achuras sabrosas, que ella comía, tripas corazón y chinchulines ¡y al campo la otra iba y volcaba la olla para negarla a su hermano!, siempre, al llegar a su casa, cuando dejaba el trabajo, el que come y no convida tiene un sapo en la barriga yo comí y convidé el sapo lo tiene usted oeoe oeoe oeoe oeoe halló cazuelas vertidas y necia burla en los labios", el joven resignado puro trabajo nada para llenar la panza "-parece cuento..." -No es cuento: ha sucedido, sucede lo que sucede en los sueños sucede en los sueños lo que sucede aunque es raro, pero en los seres hay cosas vaya, mejor es callarlo, cosas que son miserias cosas de reptil rastrero, él le rogaba unas veces, casi a sus plantas postrado, puede el hambre hacer hablar desde ruidos de la barriga hinchada, que no amargara sus horas con proceder tan ingrato; otras, sañudo y sombrío, presa de impulsos insanos, broncas entran cuando se ven injusticias por todos lados iba a azotarla en el rostro ¡y le temblaba la mano! raro el impulso frenado de una buena cachetada la de su madre el recuerdo era el ejemplo evocado, ¡ay, de esa madre que a muchos nos está al cielo llamando! madre propia que habrá buscado a la virgencita que nos ama, pero la niña era terca, el que come y no convida su corazón era malo tiene un sapo en la barriga, y, hosca, burlaba el recuerdo con el desdén más villano, hasta que un día aquel mártir de ese odio y yugo pesado, dijo: "-¡que muera!, cansado el rudo hachador con hambre cansado de andar pidiendo cansado de no tener nada ¡que muera! no la mate mi brazo, sino, a la faz de los cielos, la voluntad de los astros!" que andarán rondando y asiendo su hacha obrajera, que no mellaba el quebracho, llamó a su hermana, y con dulce voz de cariño Y halago: "-¿Sabes, le dijo, que tengo, en aquel bosque inmediato, un moromoro y quisiera para ti sola sacarlo?, la mejor colmena miel para darla y prestarla huevo de gran tamaño, a tal promesa, la joven, que era golosa: "-pues vamos", cacuy cacuy que cantaba anunciando el desenlace, pues vamos le contestó, y en procura de la colmena marcharon, "al pie de un orco cebil, tan corpulento árbol de muchos metros tan alto que echaba el cielo la copa, fronda de muchos verdes echando sombras por muchos lados se detuvieron entrambos ", -sube delante, le dijo, que yo te iré sustentando, mozo pillos y cansado joven y hambriento, para que allá, en la corona, goces tú sola el regalo", al que come y no convida cacuy cacuy luego, de un gajo en el otro, fueron trepando y treparon, como jugaron de niños ahora jugando y penando, ella de mieles hambrienta y él su venganza hambreando, corazones alegres corazones que se pierden, Cuando llegaron al sitio más eminente del árbol, "-está, añadió, el moromoro cerca de aquí, ramas hojas frutos rastreando la hojarasca en aquel gajo; échate al rostro el pañuelo mientras desciende a sacarlo, que las abejas dispersas pueden hacerte algún daño", niña mala niña ingenua golosa despiadada ella cubrióse, y a poco sintió temblar todo el árbol y derrumbarse las ramas a los tremendos hachazos " golpes que vienen de todos lados golpes que mas que doler desorientan, -cúbrete bien", le decía él, cada vez más abajo, saña del peón con hambre saña de bronca llenada hasta que el hacha y los ecos de resonar se cansaron, golpes de juntar metal y cráneo golpes de quebrar lo quebrado y llegó mudo el silencio desde los montes lejanos en algún momento llega el fin del sufrimiento, "ella, velada y medrosa, se estuvo así mucho rato, sangre dolor baba y lágrimas de desorientada hasta que, alzando el pañuelo, se vio, con susto y con pasmo, sola en el orco cebil de sus ramas despojado, infiernos que de golpe aparecen infierno que se llevan cargados sola, en aislada columna, adonde el eco le trajo la carcajada nerviosa y siniestra de su hermano, cacuy cacuy "quiso bajar, mas no tuvo dónde apoyarse a su paso, ni equilibrio ni ganas ni oscura conciencia y, vuelta al cielo la frente, rompió de súbito en llanto, no hay que llorar niña cuando la noche se ha puesto menos cuando se arrastra la noche y vino la noche; otro día pasó; de nuevo al ocaso cayó el sol, y las estrellas su helada lumbre le echaron, cacuy cacuy los días pasaron, en rededor, de los bosques en lo profundo y arcano, sonaba el órgano inmenso de los rumores sagrados; se curó la niña quedó enfermo el hermano el roce, incierto al oído, cacuy cacuy del que come y no convida mas por el miedo escuchado, de las serpientes que vigilan, que trepan del dulce nido al asalto; el rugir, hondo y bravío, o el avanzar, lento y cauto, de los tigres y leones que van de caza, husmeando, cada bestia en su lugar cada bestia rondando "ella en las carnes sentía el penetrante y helado filo de agudo puñal que se va hundiendo hasta el cabo, cabo de cavo y muchos tajos un hambre y sed febricientes la devoraban, en tanto, y su alma hería y su cuerpo la convulsión del espasmo, canta el pájaro cuando come canta el pájaro cuando nace y se muere, entre el horror de sí misma, su corazón, golpeando, se derramaba en sollozos, voces de angustia y espanto hasta que luego, una calma que colma dulce calma que calma, un sosiego fue por sus nervios vagando, y circuló por sus venas como un sabroso desmayo, y miró hacia el cielo, hacia el bosque, y tuvo un ímpetu extraño de divagar por la selva y hender volando el espacio milagros de perdonar los que perdonan después de no haber perdonado entre asombrada y medrosa, vio disminuir su tamaño, tamaño que se reduce problemas de muchos tamaños, que emplumecía su cuerpo y que eran alas sus brazos alas que todos quieren para volar por el cielo; y de mujer, en un ave viendo su ser transformado, sin saber qué pasaba abrió las alas primero, hizo en el aire un ensayo de subir para bajarse de andar bajando para subirse volando, y, resumiendo en un grito todo el horrible pasado, todo el dolor de su culpa, todo su acerbo quebranto, se hundió volando en las selvas gritando cacuy cacuy turay tura pájaro de mal agüero pero a este punto, en un árbol, sonó el quejido, imperceptibles se escuchó el sollozo, el alarido de un llanto de esos que nacen del fondo del alma rota en pedazos, almita que se rompió después de andar rompiendo y los meleros, absortos, retrocediendo, temblaron, "no hay que asustarse -les dijo, irguiéndose, el veterano-, coincidieron el cantor y el octogenario ese que gime en el bosque es el cacuí solitario; y mientras sufra la patria tanto martirio, paisanos, y nuestros ranchos no sean algo más que pobres ranchos, ¡ay! ¡porque nunca supimos, a nuestra vez, ser hermanos, se oirá ese grito, ese lloro, ese clamor desgarrado!" urutaú.

Monday, March 21, 2011

cronopios juntos uno un genio el otro el escribiente en rescate de joyas de la literatura

La Salamanca, Mario Paz escribiendo con Rafael Obligado, nace la Noche en el fondo de las abruptas cañadas, se asoma la iguana la iguana mala se asoma y se esconde mala la iguánida con los hombres que entran en la montaña, y con las sombras primeras por los valles se adelanta la noche con cada paso en los pasadizos se adelanta, aunque es dulce, en su presencia juglares le cantan a la noche las aves gimen, no cantan, y se arrojan a su albergue tropezando entre las ramas como si alguien apagara de golpe la candela; aunque es tierna, y el suspiro de sus labios llena el aura, la brisa con los fantasmas va taimada despertando execrables alimañas, deja el valle como en un momento el día pasa de la irradiación a lo negro, y en silencio ágil trepa por la falda, metiéndose entre las grietas, descendiendo a las quebradas pasa el día a la noche como pasara con los años, arrebatando las luces que el sol dejó en la montaña luces que van quedando y de pasar después se apagan, hasta que se hunde sombría en la horrenda Salamanca, nace la sombra crece y se agiganta, ¡la Salamanca! aunque haya noches cortas y noches largas, nace la sombra crece y se agiganta, antro oscuro de quiméricas fantasmas ciudad de los espíritus aldea de ánimas livianas y de almas en pena, que en los senos de la sierra largo espacio se dilata, largo sendero con pocas sinuosidades largo atajo con paredes de tierra apisonada, en columnas de calcáreo lanza sus bóvedas anchas que en algunas partes se angostan, o corriendo por encima de estalagmitas se arrastra como bicho rastrero con encantamiento; retuércese en espirales que a los abismos se lanzan para ganarle a la roca curvas y contra curvas para terminar en picada; por silente galería recta las peñas taladra uno que otro risco que se rompe en pedazos; y del fondo tenebroso oscuro fondo frondoso, en vibrantes bocanadas de chispas plateadas, arroja al vasto recinto de las bóvedas en calma camino oscuro sin un alma, el lejano cañoneo de estruendosa catarata, de tierra y pedradas torrente de color y de arcilla, luego, en grietas repartida para que un día pase la iguana, por angostas sendas marcha mostrando un camino que a veces ensancha, hasta juntarse en inmensa húmeda y tétrica sala de descanso y de parada, donde suena, siglos hace, la pertinaz gota de agua, agua que sale de las grietas en la montaña, hendeduras que se abren y tapan para que ande la iguana, ¡mansión de horror!, en la altura giran del buho las alas son esas alas, alas de pájaro perezoso, y de sus ojos redondos echa a aquel antro las llamas; bufando el lagarto brillan sus ojos en la penumbra desolada, y más abajo, esparciendo del aire espeso los miasmas da cantidad de sabandijas, de los hediondos murciélagos vuela la torpe bandada y corren los que no vuelan, corren en fila, azotando las encorvadas murallas, les quitaron sus moradas en procesión hervorosa torpes topan como topos las malditas luces malas, y, a su reflejo, o a la luz de una luciérnaga algún duende se asoma, y rápido pasa como para aunque todos sepan nadie lo vea, hundiendo mudo en la sombra los callados pies de lana, corre el pata y lana, de la más honda tiniebla, de esa que ha quedado abierta como un hervor del abismo, bordeando el infierno suben de trasgos y engendros y brujas los palmoteos y gritos, suenan como aplausos como suspiros arteros desesperados graznidos ululares y chilladas, luego, en tropel sonoroso, llenan la sala, y principio dan, bajo teas humeantes, ciegas sonoras suenan las cizañas al aquelarre maldito, hay pocos peones pero los pocos trabajan, giran en torno de un tacho que hierve a un fuego rojizo para luz y para hacer fundiciones; con varejones de tala esos hombres revuelven, baten el líquido; y echan el húmedo sapo de los pantanos traído; ellos creen que así el camaleón desaparecerá del mapa, echan la blanda lengua del perro que erró sin amo ni abrigo, de asustarse entre ellos mismos de espantarse se espantan y, en el desierto, a la luna, alzó lamento tristísimo; de las iguanas los ojos; las alas de los vampiros; siempre girando, girando en infernal remolino dentro del mismo túnel más de un torbellino, desde la gruta ignorada, nadie conoce todas las sombras suena en los campos vecinos aquel estrépito infame estertor arenoso de una voz con carraspera, ronca la flema con la dulzura de un himno,: música errante sencilla y despareja, que lleva al corazón y al espíritu de la salamanca por dentro, ansia de empresas vedadas, sed de grandeza y dominio un criollo joven y hermoso se distingue de los otros, de cribado calzoncillo el mozo, de facón a la cintura como otros, de poncho, espuela y barbijo surgido del entretejo, por la música celeste y su ambición atraído, entró impávido en la gruta presuntuoso y engreído se hundió en su inmenso recinto, un punto tembló, y un punto vaciló en su condición de embebido, pero, atrevido, como flexible culebra como uno más de las malas alimañas se arrastró por los abismos, y allá las brujas gritaron, abriéndose en ancho círculo: "-¡llegue el valiente a iniciarse, el hermoso, el bienvenido!, ¡venga luego a complacerle, venga el rey de nuestro asilo!", pesadillas de beodo camino de alucinaciones y miedos, a esta voz, rompiendo el muro, apareciendo de repente se apareció el diablo antiguo el de la cola y los cuerno, largo y flaco con el tridente en la mano, hediendo a azufre hombre y sierpe a un tiempo mismo, de caminar y arrastrarse como hace siempre "-¿qué desea el que me busca?" ronco y grave al joven dijo, largo silencio se ha puesto "-el amor de las mujeres, el caballo que yo envidio, echar suerte con la taba, buen ojo para el cuchillo, después de un rato el joven dijo, a la mula más bellaca montarla de un solo brinco, y darte el alma por todo, ¿te conviene?" "-concedido; le contestó satanás al distraído pero antes, venga una prueba para saber si eres digno," y así diciendo, Satán abrió un hondo precipicio al que se asomó el criollo sin más senda que una larga cuchilla puesta de filo; debajo, monstruos y fieras que dan hambrientos rugidos, y en el fondo, en un altar, la dulce imagen del Cristo, "-¡anda! ordenó el diablo gritando, está abierta la senda a tus humanos designios; el amor de las mujeres, el caballo que yo envidio, ¡anda! y no temas los monstruos que te saldrán al camino; echar suerte con la taba, buen ojo para el cuchillo, ¡anda! y ¡escupe y derriba al odiado, al crucifijo!" a la talla del enemigo, el ambicioso, el blasfemo, echó a andar por el peligroso precipicio y un estallido lanzó al joven, a las brujas, y a Satanás, al abismo, la dinamita triunfante en triunfante explosión de triunfante trabajo, y del obrero los picos perforaban la montaña abriendo túnel magnífico a la audaz locomotora, al nuevo, excelso vestiglo, monstruo de hierro dragón o de muchas bocanadas.

Sunday, March 20, 2011

rescatando leyendas desde el fondo de nuestra historia luces que aunque veamos nos alumbran

LA LUZ MALA - MARIO PAZ ESCRIBIENDO CON RAFAEL OBLIGADO, larga tropa de carretas atraviesa la llanura bajo la eterna hermosura de los radiantes planetas, larga tropa de carretas cortas atraviesa el llano y penetra la sabana o van por un sendero en medio de la eterna espesura alumbrada con la luz que irradian de los resplandecientes planetas, corta tropa de carretas largas bajo las estrellas nada más en esos mundos de silencio transitando abajo del techo del oscuro universo, hay un cielo abierto infinito el universo, al tardo paso sujetas de los bueyes, enfiladas, salvan lomas y quebradas, al lento andar de las yuntas cansadas o perezosas en caravana pasan montículos y hondonadas, y en el trébol florecido, haciendo áspero ruido, hunden las ruedas pesadas, crujen las ruedas con el efecto centrífugo que empieza en sus ejes como si fuera un quejido más de todos los lamentos que se escuchan en el monte crujen la ruedas pesadas y mugen los bueyes lanzan sus bufidos un búho ulula a lo lejos y se escuchan gruñidos por todos lados, vense allí en el claroscuro de mil vagos resplandores y sonidos lento el andar de las carretas acelerados los corazones, vence oscilar sus conductores sobre el pértigo inseguro, ensimismados y silenciosos, somnolientos y asustados, de llegar no tiene apuro a su rancho el picador, jinete de mil corceles montador de oficio peón diestro en cabalgaduras y cabalgatas, pero músico y cantor al fin juglar también de mil canciones, entretiene su camino con algún triste argentino que llora ausencias de amor, la Cruz del Sud, suspendida sobre los campos desiertos recuerda al Mesías remonta al Nazareno, esa cruz de una crucifixión repetida es como que tiende los brazos abiertos hacia la tierra dormida, y en la sombra sumergida aquella inmensa región, llena de mística unción, fervores de campesinos temores susurros del carpintero llama por el trébol perfumada, cruz que parece que baja como en una lluvia de estrellas con el sereno en la noche sombría con luz que está a sus plantas postrada como en perpetua oración, súbito brilla a lo lejos una luz, un resplandor repentino que se presenta de improviso, la luz maldita, la luz maldita, maldita la luz que sigue maldita la luz que se pierde, cuya historia nunca escrita saben jóvenes y viejos, es la luz maldita nadie la toca, vedla: lanza mil reflejos; se detiene y humo exhala; incendia el campo, destruye personas y las cosechas resbala como bailando en el aire como rasando la tierra en un lugar distante es la luz siniestra que va retorciéndose maligna, para quemar a alguien para dejarlo ciego, y cada uno se persigna, murmurando,
"-¡La luz mala!",
"-es el alma de un hermano, que, desterrada del cielo, solitaria y sin consuelo vaga errante por el llano, dicen que fue un peón de campo cualquiera, un espíritu cristiano de crueles ansias lleno, que, de la noche en el seno, nos ha pedido otras veces una cruz y algunas preces que lo tornen justo y bueno”,
así lo ha suplicado dice que por amor ha matado dice que por desengaño al patrón ha degollado, así dice y así pede que digan, y entretanto, esquivando sus destellos, rezan juntos todos ellos, olvidados ya del canto por el ánima angustiada, larga tropa de carretas cortas atraviesa el llano y penetra la sabana o van por un sendero en medio de la eterna espesura alumbrada con la luz que irradian de los resplandecientes planetas, y la luz mala, corta tropa de carretas largas bajo las estrellas nada más en esos mundos de silencio transitando abajo del techo del oscuro universo, los hombres ven, trémulos de espanto, cómo la luz resplandece, y chispea, y desparece, y con nueva brillantez ilumina, y cada vez más y más grande parece, ora se hunde en el bajo ora se eleva en el aire ora se pierde entre los pastizales ora sale impulsada, ora corre por la loma, pero siempre avanza, y toma por momentos nuevo brío, dicen los hombre que desde el horizonte sombrío se aproxima a cada instante y como una campana bascula para desaparecer de nuevo, y hacia atrás y hacia adelante huyen las sombras inquietas, algunas son sombras otros animales y se acerca a las carretas como un ojo centellante, y, mientras lleno de horror, uno que siente angustia que siente pena tras esfuerzos sobrehumanos, se cubre con ambas manos todo el rostro el picador, siente miedo el cristiano como si hubiera hecho algo por el alma del hermano que se murió con tristeza, el penacho de vapor suelto al aire, luz que no es de las estrellas ni proviene del oscuro universo rauda y altiva, rumorosa y convulsiva cual un potro desbocado, pasa hirviendo por su lado la veloz locomotiva, se asusta un paisano más otro no se asusta y exclama ¡mal hacéis vuestro camino paso a paso y lentamente, al alcance del torrente, antiguo pueblo argentino!, ¡cantad himnos al destino, y cuando en noche serena brille una luz, no os de pena, no temáis, criollos, por eso, si hay perdón para el maula y hay ensueño de cosecheros, que en las vías del progreso la luz mala es la luz buena!

Saturday, March 19, 2011

patroncitos argentinos contra la libertad de pensamiento


"La flagrante amenaza del Sindicato de Camioneros a los medios que publiquen información sobre sus dirigentes constituye uno de los episodios más graves para la libertad de expresión de los que se tenga memoria en democracia"

cronopio cualquiera escribiendo con cronopio obligado

Leyenda de la mula ánima, escribiendo con Rafael Obligado, segunda parte, era blanca como las nieves eternas esas nieves que se transitaron varias veces para vencer al enemigo o volver destrozados milicia desarticulada y maloliente, era blanca como los capullos de las flores de las calas que se sacan de los pantanos para tirar por donde fuera que estén recordando a los que quedaron en tumbas improvisadas en las montañas donde están esas nieves eternas, era blanca y rubia o colorida como esos cardos que dan flor en primavera, se enamoró de un soldado de la santa independencia que con Dávila fue a Chile a luchar por su bandera, se enamoró de un parsimonioso conscripto reclutado como otros a puro grito y aura en pulperías y en la pampa, y como era tejedora de las pocas y las buenas guapa la moza para hacer desde cobertores a uniformes, le hizo un poncho de vicuña más liviano que hoja seca liviano pero abrigado como para no aflojar por el frío, el buen joven se marchó a libertar nuestra América o para intentarlo al menos porque de tanto andar anduvo viendo que mientras ellos iban poniendo el pellejos otros en las capitales peleaban con la pluma y la palabra despareja guerra para unos despareja guerra para otros, andar luchando para otros cuando no se terminó de luchar para uno mismo aunque si los capitanes lo aseguran ansina nomás han de ser las cosas, partió el varón como partiera bajo fe de su palabra de casamiento a la vuelta, y ella dama mentirosa y fornicadora, dos años corridos desde la última vez que lo viera, fue tan loca y sinvergüenza que se enredo con un cura para curarse de ausencias como mujercitas abrazadas habrán andado con sotana polleras y enaguas, valga alguna ausencia con alguna presencia pero no valió vicio por virtud alguna y Dios, el gran Dios, la maldijo hiriéndola con su diestra sangre y fuego se escapó de sus entrañas vértigos y cimbras eternas acidez desconocida retorcijones imparables, y echó, su ánima a penar por las quebradas desiertas su alma de ingrata a vagar perdida por infiernos y médanos arenosos y montañas empinadas, convertida en esa mula que en la noche se pasea, mulánima mulánima gritan los paisanos cuando logran verla perfilada en las noches como una sombra, mulánima mulánima disparan en sentido contrario, en esa mula con alma de mujer infiel que se aparece también en las siestas despobladas en los aireados amaneceres o en los pesados ocasos esa mula con cuerpo lascivo puro tendones y músculos que de ojos boca y narices arroja llamas siniestras, un estigma que solamente podrá suspender el soldado valiente varón y macho leal a hembra y bandera varón y macho disciplinado y sumiso a capitanes y generales, por un decreto divino lleva colgando las riendas pasta la embocadura calzados los filetes por ahí algún bocado y la cadenilla y la brida así no se olvida que cambió una ausencia por una presencia la distancia por la cercanía un hombre por otro hombre que después pueden ser otros hombres, para que no se olvide que la extensión nunca es igual a la intención y son dos cuestiones diferentes, que la lealtad es lealtad hasta en la distancia y la traición felonía hasta en la inmediación y hasta que un hombre muy hombre duro el pellejo curtido en docenas de combates, por redimirle la pena como intermediación de diosito para librarla de la condena, con fuerte brazo y fe santa la refrene en su carrera, ciega carrera la de su muerte interminable y espantada hacia la oscuridad y la nada, iba cayendo la noche al terminar la conseja la confirmación de la fábula la resolución de la condena, y conmovido el soldado por unas ansias secretas, mudo besó, al despedirse, a los niños y a la abuela, y, cabalgando en su mula, se echó a vagar por la sierra., mula distinta a la mula que ahora buscaba, era una noche sombría fúnebre noche cuando los hombres se duermen y las almas se despiertan para jugar con las corsuelas cuando los espíritus se divierten con las vizcachas, oscuridades de aquellas en que los genios medrosos salen de grutas y cuevas de galerías secretas en los cerros y de socavones profundos en las montañas, cabalgando el soldado de la santa independencia que con Dávila fue a Chile a luchar por su bandera hasta en que una mano asomada de algún recodo hace señas como hacen los baquianos para avisar de novedades; montando el soldado de la santa independencia que con Dávila fue a Chile a luchar por su bandera sumiso con su milicia el viejo adivina en que ahí está oculto un misterio que hace temblar las tinieblas, y hasta el rumor del torrente es como un rodar de cadenas, de ataderos que no se ven de ataduras que vienen de la condena, el noble viejo marchaba por la sinuosa vereda ayer de la cordillera y ahora del poblado más cercano, cuando unas luces rojizas como refucilos azulados rayos como arco iris, hiriendo a saltos las peñas lo que no lo hieren gracias al guardamonte, le iluminaron un arria de pardas mulas cargueras hay más de un alma en pena hay más de una angustia deambulando por los infiernos más de una zozobra corriendo por el averno, bestias cegadas bestias por las luces y los colores, quietas las bestias quietas paralizadas, bufando bajo las vivas centellas como en las tormentas cuando el cielo se viene abajo, y a los arrieros postrados asustados carreteros, la faz oculta en las piedras, luego, por boca y narices echando ardientes culebras reptiles brillosos y negros blancos dientes fina y larga lengua de rojo vivo que, sierpes retorcidas los muros suben y en lo alto chispean las sabandijas amenazan zancudos y arañas por todos lados, se apareció la Mula ánima, mulánima mulánima grita el varón amante y asustado al aire flojas las riendas, aflojando el paisano él nunca se olvidó aunque ella lo olvidara muy rápido, con el corazón no se ausentó aunque ella en la ausencia lo cambiara, echó pie a tierra el soldado de las batallas homéricas victoriosas batallas y batallas de derrotados, y se avanzó a recibirla con toda el alma en la empresa aun con todo era su china, hizo a la Virgen del Valle, como a sus jefes la venia, soldado disciplinado y cristiano renegado y redimido y cuando estaba ya encima la mula, en llamas envuelta, la refrenó por sus bridas tirando para mover las embocadura y ajustar los bocados, y a su pecho vino a estrellarse, ya muerta, pero en mujer convertida y era su novia nomás la prenda, esa mujer que dejo en el tiempo pero que nunca dejó de quererla, el soldado de la santa independencia se echó a llorar como un niño el de las lides de América, llanto atrasado que tenía después de los padecimientos mientras la Virgen del Valle bajó ceñida de estrellas luz blanca centella azulada fogata y arco iris él le tendió como alfombra su rico poncho de hojuelas, y ella posada un instante para aceptar la promesa, volvióse al cielo llevando purificada en su esencia, un alma mísera de mujer indigna una alma triste de mujer solitaria, pero que ha amado en la tierra.

Friday, March 18, 2011

con todo mi respeto a cronopios inolvidables esta vez a obligado

Leyenda de la mula ánima, escribiendo con Rafael Obligado, iba un anciano trepando en ágil y musculosa mula cabeza de pito y corta remontando la sierra entre pedregales, un cerro entre laderas una que otra montaña, iba un anciano con su mula de orejas largas espoleándola con sus escarpines, iba un anciano montando esas alturas montado silencioso como una parte como una partecita de la tropa de hombres bravos en el tropel de varones curtidos de mucho coraje y de pocas palabras desde el sombrero a la barba suelto el barbijo de seda enseñada la cicatriz que cruza su cara peluda faz que se hizo después del último entrevero, iba el paisano en silencio siguiendo la caravana de recios y matreros sin destinos ciertos, poncho de agreste vicuña con franjas, flecos y hojuelas, lastres brillosos del propio pelo peinado iba un anciano trepando en ágil mula de pezuñas estrechas y pequeñas bestia híbrida y forzuda nudos de nervios y músculos en sus brazos y patas hacia la cumbre pasando por los senderos, iba siguiendo las huellas de arreos que otrora han quedado petrificados en la arena en la tierra y en la cordillera, cuando bajan las nieves cuando por la primavera vuelven los brotes a los lapachos o los cactus reverdecen, seguía un anciano las huellas de los equinos de otros soldados montados que van y vienen defendiendo las fronteras que van y vienen resistiendo en las taperas que van y vienen cubriendo las fortificaciones, que con los límites van marcando los señores de levitas calzados de botines con polainas, iba el viejo con poncho de indómita vicuña con franjas y canutillos en pliegues ha medio siglo bordado por su finada, la prenda ella la ha bordado y él no se lo saca, iba un anciano trepando cansado del tiempo de muchas guerras y rencillas ganadas de muchos arrebatos y disputas perdidas, llevaba usutas (sandalias no he de decir en mi tierra) colgadas en la montura, que así le guardan los pies cuando ha de andar a pié para que las bestias descansen las usutas le sirven como le sirven de espuelas y un guardamonte de cuero con que se cubre las piernas, hace frío en las alturas pero más duelen los magullones de las ramas de los cardales que al paso lastiman iba un anciano trepando en ágil mula la sierra, con guardamonte a cuyo empuje se inclinan arbustos, cardos, malezas y huyen guanacos y cabras cuando al trotar de la bestia de insignificantes castañas sin cuernos, con resonantes crujidos sobre sus flancos golpea, cadencia de mulas con colas sin pelos de caballos cansados de burros cargados, sonidos de silencios de largas cabalgatas en silencios iba el hombre cansado, lleva aquel viejo en el alma la triste música interna de los recuerdos de las moza de los años mozos de los cortejos de las celebraciones patronales de las ceremonias por las victorias con la dama de sus sueños de sus sueños que se hicieron realidades en los besos de las ternuras maternas, el dulce abrazo infinito y el largo ¡adiós! de su prenda con todo se mezclan sus evocaciones, iba un anciano trepando en ágil y musculosa mula la sierra cuando, a través de los Andes fue a combatir y a quererla, cuidando sus pertrechos como los otros que los cuidan celosos con sus armamentos suspicaces con sus suministros, iba un anciano montando a esas alturas montado silencioso parte de la tropa de hombres bravos y allá en lo oculto, en lo hermoso, la imagen fulgida, eterna, de nuestra patria, la patria, ¿cuál patria?, esa patria de las heroicas proezas en la crónica de mentirosos cronistas que no registran la intemperie iba el anciano cansado, haciendo patria el anciano desde tiempos inmemoriales siempre en caravana con la cuadra en su referencia, hazañas de William Brown en los mares, de San Martín en la tierra, él fue con Dávila a Chile, reclutado con Güemes a la frontera ya casi ni se acuerda aunque el corazón le funciona para la montaña y la prenda, él fue con La Madrid a Tarija, a Junín con Necochea censado con el ejército, iba un anciano trepando en ágil y musculosa mula y era tan fiel en amores como atrevido en la guerra una cara y dos monedas antes que dos caras y una moneda, tiene este viejo una enjundia un triste meollo que lo ha dejado en el centro de una tormenta con refucilos entre rayos y truenos, tiene este viejo en su corazón un entripado una punzada que ni el demonio la tuesta, y donde asoma un peligro es para hollarlo una fiera tiene a este viejo una pena le ha burlado el atropello, de la espantosa mula ánima tantos horrores le cuentan, el presiente y consiente en silencio disiente que no es mula su bestia de carga con la que trepa y baja humillado en silencio por lo que el corazón en su mal agüero le muestra, espantos que por hallarla a su paso y refrenarle las riendas, hizo a la Virgen del Valle esta sencilla promesa después de cruzar vastas fronteras cerrar infinitos itinerarios, haz que la encuentre, y de alfombra pondré a tus plantas de reina este mi poncho tejido por mi finada la prenda, en su borrachera se ilusiona embebecido iba el hombre, embebido y bebido cansado en sus recuerdos y penas, cuando de un rancho asentado sobre la abrupta ladera salióle al paso, en tumulto, un mocetón y una vieja y una serrana y dos niños, y hasta una cabra casera, sucias las caras, y un susto lívido y áspero en ellas, “¡va por allí!” -le gritaron-, “¡va por allí, por la cuesta!" el ánima de su amada va un anciano trepando en ágil y musculosa mula la sierra esa mula de baja altura y cuerpo relleno su mula de inconfundible cuello de única grupa transitando los senderos, "-¿quién?” -preguntó, anda el alma como los demás andamos penando y deteniéndose el del barbijo de seda, “¡ella! ¡la mula maldita!” leyenda que no se escucha es leyenda no contada la mula que muerde que mirando mete miedo la mula de uniforme pelaje de blancos y largos y blancos dientes, “la mula maldita que por la noche anda suelta”, las noches de luna nueva las noches de luna llena "-sí, dijo el mozo, la he visto al despertar de la siesta" dice el mozo chismoso", de día es como una sombra que aparece y se funde con el espejismo de la tarde ingrávida alucinación de mil temores y miedos en la modorra, gimiendo, “-y yo, añadió la serrana, desvanecerse en la niebla" liviana en la polvareda disiparse en el sereno "-mas, cuando pasa de día, como esta vez, se presenta de viuda, toda enlutada”, cuando nadie se le ha muerto espantos que por hallarla a su paso y refrenarle las riendas, él hizo a la Virgen del Valle una sencilla promesa, “en dirección a una iglesia", justo para donde camina en su ausencia, ojos que no ven corazón que no siente va un anciano trepando su ilusión lo traiciona, viuda falsa que a la iglesia camina es mujer del cura vivo el avivado del curita que se la curte en ausencia del guerrero, "-y al regresar cada noche, le cuentan es mula en llamas envuelta", que además de relinchando anda otras veces gimiendo de mujer a mula animal sin fronteras ¿serán sus penas lo que vomita?, ¿sus gustos sus padecimientos?, ¿serán sus ilegítimos deseos las igniciones sus llamas?, las llamas de su infierno "-pues a esperarla me quedo", dijo el del poncho de hojuelas lastres brillosos del propio pelo peinado, "-¡ah, qué mujer!" -persignándose murmura al cabo la abuela, hay que rezar para que su alma se libere que ella fue mala pero el curita no tendrá ni perdón ni consuelo la nana que pega, mientras el viejo soldado entra a su rancho y se sienta-, "¡ah, qué mujer!, piensa era blanca como las nieves eternas y fue buena como las almas en pena.

Thursday, March 17, 2011

versión libre del ucumar en épocas de mucha libertad y en épocas que a nadie le importa la libertad si no es rentada

Versión libre de la leyenda del Ucumar en una época en que se pueden hacer todas las versiones libres que uno quiera, en las tardes oscuras de invierno cuando las sombras proyectan otras sombras en el copioso cañaveral y en el monte en las laderas de los cerros cercanos, cuando las sombras proyectan otras sombras en la selva en las yungas con empinados árboles escondidas cataratas y lianas, cuando las cotorras y los loros lanzan sus últimos graznidos del día, y las urpilas y las corzuelas ya están durmiendo, en esas tardes cuando las sombras que proyectan otras sombras y todas se mueven con la cadencia del viento como fantasmas que circulan caminando y corriendo en medio de otras alimañas, como duendes juguetones como genios que juegan a la mancha mientras las vizcachas se esconden, como apariciones que se tropiezan en los surcos levantando polvaredas transparentes como esas mismas figuras que no se ven como tampoco se ven las arañas o los mosquitos que molestan y pican confundidos en nubes de polvo que se disgregan en el aire, en esas tardes oscuras de invierno cuando los ruidos se multiplican en otros ruidos de picaflores invisibles de gorriones de silbidos ahuecados, y ruidos amortiguados en otros ecos y en otras resonancias que viajan con las sombras proyectadas de otras sombras que van y vienen, es cuando él se atreve con un leve pero potente bisbiseo, ucu ucu, llama desde algún lado de los puntos cardinales desde algunos de los lugares por donde las sombras danzan como espectros tristes o divertidos que van y vienen todo el tiempo sombras y proyección de las sombras que transitan entre hojas con formas de lanzas anchas y fuertes con movimientos y ruidos, manchas proyección de otras manchas que circulan entre hojas con formas de corazones hojas perforadas, pintas proyección de otras pintas que transitan entre hojas con la forma de lágrimas hojas largas hojas cortas hojas como onduladas hojas dentadas, entre silbidos que casi parecen quejidos más bien que entre silbos que casi parecen suspiros y entre chiflidos de la brisa cuando el viento desaparece, del viento cuando el hálito helado se fue y se llevó las sombras para otro lado, en las tardes oscuras de invierno cuando las sombras proyectan otras sombras en el copioso cañaveral y en el monte en las laderas de los cerros cercanos o en el pedemonte o en la selva o en la yunga es cuando él se atreve, ucu ucu, llama desde algún lugar del monte de la floresta cerrada desde allá donde la copa de un sauce llorón se cierra y se abre con las corrientes del viento o del agua del arroyo con agua cristalina que no termina en ningún lado desde allá donde en el cañaveral se produjo un hueco como en un verde volcán sin erupciones, ucu ucu Ucumar, llama él con un ligero pero enérgico ronroneo un ronquido apagado que mete curiosidad antes que miedo casi el ruido de un canario, ganas de fisgonear en la espesura antes que desconfianza casi el zureo de una paloma, impulso de merodear antes que desasosiego casi el zumbido de una abeja, en las tardes oscuras de invierno cuando las sombras proyectan otras sombras varón o mujer en el copioso cañaveral entre cepas silvestres desparramadas varón o mujer en el monte varón o mujer en las laderas de los cerros cercanos, cuando las sombras proyectan otras sombras en la selva varón o mujer en las yungas paseando en las lianas jugando con el arroyo, cuando las cotorras y los loros lanzan sus últimos graznidos del día, y las urpilas y las corzuelas ya están durmiendo, el Ucumar espera a quien lo escuche.

Wednesday, March 16, 2011

rescate de leyendas de cronopios populares que están más en la boca de cronopios y famas

Descripción no autorizada del Ucumar para armar la leyenda más completa en la tradición oral que en los libros para mis hijos en épocas en que las autorizaciones pasaron a la historia gracias a las redes sociales por supuesto, los ojos saltones redondos profundos y verdes parecen dos terones inmensos bolonchos de alabastro de cristal transparentes, esmeraldas tipo agüita esas bolitas que son sus faroles como bolillas de niños con temores, tiesas esferas como que se las hubiera tragado y hubieran desembocado justo ahí, donde por el aspecto general se prestan para que un escalofrío lo recorra a uno desde las piernas a la nuca, es el pánico que produce desde abajo hacia arriba, es que además por esa presión que se ve que tiene en su cabeza por la sangre que hierve desde su pecho, resaltan también de la misma manera que esos ojos dos inmensos colmillos dos incisivos en medio de otros blancos y manchados dientes desordenados corroídos y amontonados que sobresalen de su hocico de oso pocas pulgas y malformado, como huesos que despuntan de esa jeta con pelos a los costados que desde las quiscas de su cabello sucio y terso bajan con la forma de patillas naturales que en curvas desprolijas terminan en los pelos de su propia trompa como si fueran un lunar peludo o puro pelo sin lunares nadie se atrevería a indagar en esa espesura, menos niños con cargos de conciencia y desconfianzas justo ahí donde por el aspecto general llevan a que un espasmo lo recorra a uno desde el cogote a los perniles con la forma de un escalofrío frío y parejo, es la pavura que produce desde arriba hacia abajo, los pómulos saltones también y arriba de sus rectos maxilares completan la cabeza y su más pasmoso mecanismo de defensa chica la cara para tamaña caja como si se tratara de una trituradora de un hueco con dientes, de una máquina de tracción muy grande y muy fuerte como si se tratara de un trapiche que puede reducir lo orgánico pero también lo inorgánico del alimento que se consigue, como bocados de hombres que atragantan con las partes de los miembros que van perdiendo, como tacos de fieras que se resisten de carroña que completa su alimento, y encima digerirlo dirigiéndolo después de masticarlo en esa dirección que termina en esa panza inmensa, justo ahí donde por el semblante ordinario esa barriga y ese pupo mugriento contribuyen a que un estremecimiento lo recorra a uno desde las patas al occipucio, en ese espanto que produce desde abajo hacia arriba, las zancas cortas con lamparones con callos y sus manos largas carnosas musculosas ulcerosas y regordetas las uñas largas quebradas y mugrientas parecen el vómito de un monstruo parecido que grita y hace arcadas brincando con esos apéndices de grasa de cuero y de pelos que utiliza para caminar y rascarse cada punto de su cuerpo desproporcionado justo en los lugares donde por todo su aspecto se prestan a que una palpitación lo recorra a uno desde la cerviz a los tarsos temblando expectante sorprendido, en ese espanto que produce desde arriba hacia abajo, su grueso y largo bimbím su amigo con la forma de boa pitón que nunca entra en garrampa y dos inmensos testículos confirman su virilidad, los instrumentos exagerados con los que micciona y copula en cualquier lugar del pedemonte, compaginan la vastedad la redondez y la condición de circunferencia concéntrica de esa inmensa barriga que inflada con forma de pera gigante casi toda una superficie sin pelos, liquidan a que un estremecimiento lo recorra a uno desde las piernas al occipucio, de arriba hacia abajo, después de todo es el Ucumar aunque ande de capa caída y se encuentre muy triste porque las vírgenes hoy son muy escasas.

Tuesday, March 15, 2011

no todos somos impresentables aunque algunos seamos menos presentables que otros

Despegando de renacimientos de nacionalismos tardíos en el país de algunos ciegos y otros que no queremos ver precisamente lo que ellos quieren ver, quiénes se creerán que son si nunca han transpuesto las fronteras de la avenida general paz entonces no tienen derechos a faltarle el respeto a quienes viven en los dos millones setecientos ochenta doscientos mil kilómetros cuadrados restantes que no pertenecen a la ciudad de donde no salen si no es para ir adonde son unos anónimos que es lo que ellos mismos llaman el mundo desarrollado, está bien que ellos no te den ni cinco de bola que como hacen siempre que se otorguen diplomas y que se autocalifiquen personalmente y entre ellos que A diga qué bueno que es B y que B que es amigo y compinche de A lo alabe ante otros ante auditorios amigables en congresos amigables selectos por ellos mismos está bien que los editores publiquen sus escritos impresentables que algunas veces presentan entre ellos mismos como obras universales está bien que sufridos y confundidos alumnos piensen que ellos son la flor y nata del pensamiento nacional y aún popular, lo que no está bien es que te falten tanto el respeto y quieran colonizarte como nos colonizaron hace quinientos años los adelantados que por acá anduvieron y que encima pretendan que con tamaño despropósito quieran que uno ponga cara de que los entiende y los sigue en sus delirios que a veces internacionalizan como ahora con el autor de la fiesta del chivo, el último bufón don Juan Martín Martín versión siglo veintiuno no representa a nadie tal vez para ser objetivos represente a una docena de enfermos parecidos tal vez a unas cuantas docenas de los cuarenta millones que somos gordo y desocupado como andará para expresar tanto resentimiento tanto fanatismo escindidos de aquel al que han podado la figura frondosa de la propia necedad de reconquista obediente quijote de amos que se encuentra en la rosada y pagan el sueldo de miserables sin pueblos porque él como ellos trabajan para el solaz del amo solamente sin la libertad que pregonan, cancerbero de la biblioteca nacional de decorado sencillo pero de gran aspecto de la decadencia nacional justamente en tiempos de florecimientos de nacionalismos tardíos porque en ningún lugar del mundo son tan complicados, ni tan apoltronados en tapicerías de color púrpura y blanco en las paredes, muebles antiguos, un hermoso reloj de carey, vasos de Sevres en los rincones, arañas y candelabros de bujías, dos o tres candeles de estilo, replegados sillones de madera esculpida, las puertas acolchadas y sus espesas cortinas, precauciones minuciosas contra el viento y el ruido exterior para procesar el veneno que tienen después de años de frustraciones personales y de venenos internos para confeccionar el discurso para la gilada expectante sin el artificio y el maquillaje que le había dado la ilusión de la multitud intolerante, el mismo guasón que escribió una carta abierta que en este caso es el elemento con el cual los bufones envían sus señales a los lejanos amos esclavos también pero devenidos en patrones de estancia gracias a la apropiación ilegal a la acumulación desenfrenada carta abierta que seguro que copiaron y les sirve para darle el toque popular a sus proclamaciones de gordos escaldados, él en particular aplastado por el peso de una misión supuestamente trascendental que no ha podido llevar por exigüidad de músculos y estrechez de cabeza hay que dejarlo con su digestión y con el otro gordo ignoto y famoso que le hace de eco el de escritos imprudentes que a la vez se van congratulando con los otros bufones similares, Juan de Calabazas bufón mayor de un reino de un castillo de naipes apilados en el país de los ciegos donde el tuerto ya fue rey o en todo caso donde el bizco pretende ver lo que no puede por su estrabismo pero que juntos pretenden que los demás veamos en particular los que queremos estar despegados, en cada una de las convenciones que hacen para probar sus popularidades que no tienen porque son popularidades justamente nacionales intrascendentes, el bufón de Calabacilla con el Capadoxo que anda repitiendo sí, claro, de hecho, en la novela hay cosas tremendamente divertidas, porque cuando Heidegger en la Introducción a la metafísica habla de las dos tenazas, ¿no habrán leído de una mala traducción y fueran dos hojas de una misma tenaza?, de Estados Unidos y de Rusia, está hablando de la tercera posición, entonces acá Dieter Müller está riéndose: hay un tipo que se encuentra con un nacionalista argentino que le dice que Perón no es nazi sino que Hitler fue peronista, que la tercera posición verdaderamente la inventó Perón, dice, y es notable que en los 70 había muchos tipos de Guardia de Hierro que llegaban al peronismo desde Heidegger, desde la Introducción a la metafísica, de esos pasajes de las tenazas entre el imperio de occidente, mercantilista, y la masificacion soviética, si vos empezás a sumar peronismo más Nietzsche más Heidegger, es relativamente sencillo deducir quiénes son, los gordos se rascan y espantan las moscas que sobrevuelan porque se fundió el equipo de aire y los ascensores no funcionan y los empleados se chorean libros también incunables de la pieza sencillamente amueblada que recibe la luz de dos ventanales al sud, algunos sofás de caoba con respaldar y asientos de damasco, una docena de sillas de igual estilo y una mesa redonda del frío ajuar oficial en esa mole de cemento que dejó de ser la biblioteca nacional para pasar a coto de caza de sindicalistas corruptos, ellos estarán tranquilos los demás debemos despegar de este renacimiento de ese nacionalismo tardío, por lo menos yo que vivo en los mismos kilómetros cuadrados que ellos quiero hacerlo, quiénes se creerán que son si nunca han transpuesto las fronteras de la avenida general paz entonces no tienen derechos a faltarle el respeto a quienes viven en los dos millones setecientos ochenta doscientos mil kilómetros cuadrados restantes que no pertenecen a la ciudad de donde no salen si no es para ir adonde son unos anónimos que es lo que se llama el mundo desarrollado, o a mí que a esta altura estoy harto de la falta de respeto de políticos y periodistas intelectuales autoproclamados representantes de círculos cerrados y corporativos que permanentemente menoscaban nuestra dignidad intelectual, de cualquier manera nunca seremos como ellos.

Monday, March 14, 2011

bieografía no autorizada de un tío en el país adonde chupar la media es sinónimos de lealtad

Biografía no autorizada del tío del cuento del tío, cuando volvió desde la docta a mercedes convertido en dentista lo esperaba una media docena de damitas ardientes desesperadas despiertas y calientes para que ese jovencito de los bigotitos finitos que copió de del carril y de algún otro artista de todos a los que perseguía para pedirle autógrafos las desposara, era el estilo de la época de no andar aflojando ni dando muchas vueltas aunque él fuera el hijo doctor del enriquecido almacenero del pueblo que en realidad lo tenía tan cortito que así como lo persiguió con el estudio toda la vida diciendo los hijos deben ser mejor que los padres ahí nomás en la vuelta lo persiguió casamentero y apurado, así que consentido y presumido y obediente como era se eligió la mejorcita y encaró nomás en dirección de cumplir de acuerdo a los pedidos cabalmente con todos los compromisos sociales con todas las pompas y todo lo que le pidieran a ese obediente hijo de mamacita grandote ya vestido, de trajecito príncipe de gales para él y trajecito rosado para ella en el civil y riguroso frac para él y vestido blanco de virgen en serio para ella, pero como en el cuento del tío se sintió profanado sin tener la más mínima culpa sorprendido como si no supiera en su buena fe que era la fe de un hombre de bien espontáneo no la de un malparido cualquiera si la tuviesen los perdidos sin nadie que lo anduviera espiando, la mejorcita le resultó la peorcita que de cuajo le suspendió la picada de los viernes con los amigos y le restringió a unos cuantos clásicos los partidos que podía ir a ver los domingos del club que tanto quería su almafuerte del carajo, de aleccionarlo todos los días de su tediosa existencia por entonces que el trabajo independiente es más esclavizante que el conchabe cuando lo despertaba para que llegue a hora hasta el hospital del pueblo adonde ella misma le había conseguido un puestito de la provincia y que se instalara en su modesto consultorio justo desde las cuatro de la tarde hasta las ocho, así fueron entonces los avatares del elegante enganchado de bigotitos que se engayoló en un casamiento por la iglesia que revolucionó esa pequeña localidad de agricultores prósperos donde vivía, a él podía pasarle de todo pero siempre andaba de punta en blanco bigotitos puntillosamente recortados con su blanca sonrisa y su moderno peinado a la gomina, y cuya fiesta fue en el lotecito de casi media manzana que le regaló el papá metido en todo por lo que el mismo jovencito apenas acomodado y emancipado metió violín en bolsa y partió a giles a vivir tranquilo, cuando se aclimató en giles convertido en vecino notable y sensible tan notable y tan sensible que lo comenzaron a llamar el tío todos le decían el tío esto el tío aquello y hasta lo votaron en las elecciones, le decían así porque a veces trabajaba gratis o cobraba sus servicios en especie escarbando las caries en las bocas de todos esos que le pagaban con una docena de huevos con una gallina o con un par de batarazas que usó algunos domingos de entrecasa, esa movida de los multiplicados sobrinos putativos lo hizo caer en la cuenta que podía producir su segunda emancipación esta vez de la yegua que tenía por esposa que gritaba y se quejaba todo el día sin que a él lo conmoviera o se le moviera un pelo, eso de la popularidad de no embromar con la salud de la gente le prendió una lamparita en su cabeza con eso de meterse en la política y al cabo de unos cuantos meses dejó de preocuparse por las dentaduras de los que lo visitaban y de renegar con los mecánicos dentales y comenzó por ser el intendente, pero eso le trajo nuevas responsabilidades y nuevas obligaciones y cualquiera aunque le dijera el tío le reclamaba y lo retaba como si fuera su propio papá o la vieja hechicera propia que estaba más calmada, por eso cuando terminó su mandato en realidad mandado por los milicos desde giles se fue a los buenos aires de diputado de los orejas lo que le significó cuotas adicionales de emancipaciones del papá perseguidor de siempre de la gorda y molesta arpía de los molestos vecinos de giles que pedían pasajes y remedios de la larga cadena de sus pesadillas de sus devaneos, y además esa tercera emancipación le reportó la posibilidad de tener algún amorío de esos que por entonces se conseguían en corrientes tres cuatro ocho segundo piso ascensor y ropa de cajetilla convertido en persona de confianza y del círculo íntimo de ese general que fue ministro de trabajo de previsión y de todos esos trabajadores que se mandaron un quilombo y lo pusieron en la rosada, convertido en tío de los giles en buenos aires con caída a la naciente clase media de mozas pintonas y querendonas convertido en diputado de la nación y hombre de confianza de ese general que se afianzaba y de comenzó a recibir reproches reconversiones parecidas a las viejas amonestaciones de su papá a las antipáticas reprimendas de su mejorcita de otras épocas de los giles de giles y lo obligaron a viajar sin destinos a media docena de destinos en ciudades interesantes por cuyas calles paseaba bien empilchado y con nostalgias por su formación pueblerina en ciudades vacías de arrabales y congestionadas de multitudes que ni sabían de sus rangos y de sus problemas de porqué el general lo tuvo a mal traer de embajador plenipotenciario andando por todo el mundo caliente como andaba porque extrañaba, tan obediente que fuera el tío se sentía manejado como en el cuento del tío para que ese viejo pintón de los bigotitos finitos que copió de del carril y de algún otro artista de todos a los que perseguía como lo persiguieron sus destinos y los itinerarios más importantes con el general de sus amores que de viejo se hizo chismoso cuando viró ese varoncito de los bigotitos finitos que copió de del carril y de algún otro artista de todos a los que perseguía de delegado a señor presidente, eso le servio para la cuarta emancipación veinte años después de todo y por orden del que se encontraba en el exilio, el mismo al que no le gustaban los zurditos sus amigos, cuando vio que lo tomaban de otario se fue como el que se va sin que lo echen que vuelve sin que lo llamen firmando un decreto concediendo la libertad de todos los presos políticos de una nación descuajeringada remota anónima de anomia la amnistía de presos comunes y los que no lo fueran, cuando partió con lo mariachis una sonrisa tardía se le fue dibujando en la cara finalmente se había desquitado de todos los que en su vida pasaron por la larga cadena como el viejo más viejo que su vieja por los giles y por los otarios que se tragaron lo de la hora del pueblo y que andarán hablando a sus espaldas.

tocando la marimba

tocando la marimba
para que toquen todos

es la economía estúpido

es la economía estúpido
para todos los que creemos que sabemos de economía y sabemos muy poco

buscándome

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paz - castillo

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2010

cuentos del abuelo que no son más que cuentos que se van copiando a lo largo del tiempo

MIAMI.- Uno tiende a pensar que las canciones infantiles no son otra cosa que tradición oral de origen incierto, convertida en dominio público y, como consecuencia, creaciones exentas de todo reclamo propietario.



"Sobre el puente de Avignon", por ejemplo, es una canción francesa del siglo XV y alude al famoso puente medieval de Saint-Benézet, que se extendía sobre el Ródano. Y "Mambrú se fue a la guerra" fue compuesta en 1709, tras la Batalla de Malplaquet, donde Gran Bretaña y Francia se enfrentaron para dirimir la sucesión española. El Mambrú en cuestión era el duque de Marlborough, a quien los franceses creían muerto.



Pero nadie conoce la identidad de sus creadores y en algunos casos, como el de Mambrú, se sospecha que se trata de una melodía originalmente árabe, que llegó a Francia con las cruzadas.



No es el caso de "Happy Birthday To You" ("Feliz cumpleaños"), considerada por el libro Guinness de récords la canción más popular del mundo, entonada en los más variados niveles de disonancia y en una multitud de lenguas en aniversarios de bebes, adultos y ancianos, incluida en cajas de música, teléfonos celulares y tarjetas de aniversario, llevada al espacio como uno de los testimonios de la cultura del planeta Tierra y memorablemente cantada por Marilyn Monroe el 19 de mayo de 1962 (78 días antes de su suicidio) a su amante, el presidente John F. Kennedy, en una celebración multitudinaria en el Madison Square Garden.



"Happy Birthday To You" no sólo tiene un origen comprobado, sino que además tiene dueño y copyright, y es objeto de una fascinante batalla legal por lo que podría representar unos 2.000.000 de dólares anuales en concepto de derechos de autor.



La historia comienza en 1893, cuando las hermanas Mildred y Patty Smith Hill, maestras jardineras de Kentucky, confeccionaron un libro titulado Cuentos cantados para el j ardín de infantes, que fue publicado por la editorial Clayton F. Summy Co., de Chicago.



La primera canción del libro se titulaba "Buenos días a todos", pero durante un cumpleaños del que las hermanas participaron, Patty sugirió cambiar la letra de la canción por "Happy Birthday To You", como una manera de homenajear a la niña que ese día celebraba su aniversario.



Esto es, en realidad, lo que se supone, porque no existe documentación que establezca que la letra de "Happy Birthday To You", de apenas cuatro líneas, sea efectivamente autoría de Patty Smith.



En marzo de 1924, un editor llamado Robert H. Coleman publicó una versión de "Buenos días a todos", que incorporaba la letra de "Happy Birthday" como alternativa. Con el advenimiento del cine y de la radio, la canción alcanzó una extraordinaria popularidad.



En 1931, fue incluida en el musical The Band Wagon , de George S. Kaufman y Howard Dietz, que protagonizaron Fred Astaire y su hermana, Adele, y dos años más tarde, cuando la Western Union lanzó su primer telegrama cantado, eligió "Happy Birthday To You" como su primera canción.



Fue, precisamente, en 1933, cuando Irving Berlin volvió a usar la canción en su comedia musical As Thousands Cheer ( Mientras miles vitorean ) que Jessica Hill, la tercera de las hermanas Hill, decidió emprender acciones legales.



Tras demostrar la similitud entre la canción original y "Happy Birthday To You", Jessica Hill logró que una corte la autorizara a registrar la nueva versión, que obtuvo un copyright en 1934.



La compañía Summy de Chicago publicó la canción en 1935. Según la legislación en vigor, los derechos debían expirar en 28 años, pero el acta del derecho de autor sancionada en 1976 los extendió hasta 2010. Y en 1998, a propósito de una disputa en torno de una canción de Sonny Bono, la Corte Suprema norteamericana añadió 20 años más al derecho de autor, lo que prolongó el copyright sobre "Happy Birthday To You" hasta 2030.



Algunos expertos, como Robert Brauneis, de la Universidad George Washington, argumentan que si bien los méritos para registrar una canción popular son válidos, en el caso de "Happy Birthday To You", los argumentos se ven anulados por la inexistencia de pruebas fehacientes acerca de quién escribió la letra de la canción.



Si todo esto hace dudar al lector acerca de la conveniencia de cantar "Happy Birthday" la próxima vez que algún familiar cumpla años, a riesgo de que aparezca alguien de Sadaic a reclamar los royalties, tranquilícese. Las demandas sólo se aplican a la explotación comercial de la canción, no a las fiestas familiares.

(tradición conocida gracias a mario diament en una nación de 2009)

boludeces de humor negro que circulan

por el ciberespacio y por la calle

Hay un tipo gangoso sentado en un banco del Central Park de Nueva York,
en la noche de Nochebuena, cuando de pronto se acerca una dama y se
sienta a su lado. El tipo, que andaba solo, para romper el hielo le dice:
- ¡Ghola!
- ¡Ghola!
- ¿Ghos tanguien shos gangosa...?
- Shi.
- ¿Y haglás Eskañol?
- Shi.
- ¡Lo único que te jaltaria esh sher Arlgentina!
- Shi, shoy Arlgentina.
- ¡Uy! ¡Qué shuerte! ¡Yo tamguien shoy Arlgentino! Yo eskaba solo acá
shentado hoy que esh noche guena y jhusto akareciste vosh que tamguien
shos gangosa y Arlgentina. ¿Que te karece shi hacemos algo...?
- Gueno, ashi ninguno de los dosh she queda sholo.
Entonces se van los dos a cenar. Empiezan a charlar, a conocerse y se van
a pasar la Nochebuena en un Hotel. Se encaman, y luego de unas horas de
sexo, lujuria y placer se produce la siguiente conversación:
- Oguime, le dice la chica, tengho que confesharte algho.
- ¿Qué esh?
- Tengho Sida...
- ¡Ah...! ¡Güenísimo! ¡ ¡Yho tengho Pan Dulce!

ADN

ADN, los derechos y los ácidos. No sé mucho de los derechos a darse cuenta de que la privacidad es la privacidad y ninguna ley puede cambiar de una entidad de este tipo fuera de la condición humana, o la cosmética o la justificación de un derecho natural e inherente a lo esencial de nuestra más pura naturaleza, y que esto es como un apoyo a la vida antes de que otros principios, si uno trató de construir un sistema o establecer prioridad sobre lo que está aguas arriba o aguas abajo en este autodeterminada, y con independencia de tema o la implicación de otra u otras personas en esta iniciativa. Por supuesto, las líneas que marcan los espacios reales y virtuales en todo esto son muy indefinida ya veces hace que el avance hacia lo que aún no se sabe si se hiciese lo que con la eutanasia, o en un extremo opuesto a incurrir en errores extraordinarios como privar a alguien de libertad no recordar el número de identificación de la memoria o su look hippie de desgracia como lo fue para la Argentina en los años setenta. La intimidad es la intimidad y creo francamente que debemos estar de acuerdo - no palabrería - la mayoría de las personas que habitan este planeta, pero privacidad que no debe confundirse con el privado, como parte de nuestra personalidad es constitutiva, pero no es determinante de nuestra función social se despliega en una amplia gama de posibilidades, y luego sucede que alguien quiere meterse con nuestra privacidad sin una petición o similares , también puede ser individual más o menos dispuestos a compartir nuestra intimidad con uno u otro o directamente a no compartir. El que fue violada, sin duda, es herido en sustancia, sino la sociedad en su sistema como se señaló en ese caso a quien la lesión y, en general condenando la actitud, pero no heridos alivio al que sufre y en todo caso sólo contiene el enigma nunca es recuperada por el individual y así es como entrar en el gran área de gris que existe en esta materia que va del negro al blanco, ya la tercera, que, como grupo lo resolvemos nuestras lesiones socialmente con los que obtenemos asuma que sufrió una lesión en su intimidad somos que no participan, lo hacemos a veces y otras no ?, ¿cómo lo que otros entienden que debemos comprometernos con la privacidad de los demás, especialmente cuando la persona no solicita o cuando lo solicite expresamente, o si la persona no lo hace? ¿Por qué habría de lo que otros quieren ser y no es lo que debería ser? ¿Está bien que otra carga generacional se convierte en uno que pertenece a otra generación? ¿Hay alguien en el sistema con la capacidad de sopesar las decisiones íntimas no es socialmente perjudicial, ¿alguien puede obligar a otro para alterar las decisiones subjetivas? Aunque las costumbres argentinas como nos inclinamos a menudo para tomar el lugar de los dioses intimidad es la intimidad, y aunque se encuentran con la base para los que no se ve bien para obligar a alguien compulsivamente directa o indirectamente a someterse a las pruebas de ADN para determinar su por caso o formular objeciones si hay razones que podrían desencadenar acciones, para asegurarse de que la decisión de convertir esas características cualquiera de los términos de la ecuación esa es nuestra inherente e inviolable espléndida privacidad, o la totalidad de sus términos. En cuanto a la integridad, en su resolución y si las normas que puedan estar en ese sentido la estatura de su propia probidad es primero una decisión individual y la privación y si uno es conjunto y también con su entorno que no es perjudicial, no hay razón alguien puede reclamar el derecho a oponerse, porque de la misma manera que podría desafiar lo que creemos es posiblemente el otro, evidentemente, más de un lío armar estilo argentino con piquete y todo, y razones más legítimos distintos de los que se hicieron sobre si son incompatibles con ellos mismos, y mucho menos si éstos pertenecen al anuncio para la afiliación de uno mismo. ¿Cuántos ejemplos de problemas no resueltos en nuestra sociedad es sólo porque la gente elige para preservar su integridad? Debido a la dignidad, porque la vergüenza y la sobriedad son instintos independientes están en un nivel más alto que la evaluación externa de la honra o deshonra a sí mismo. ¿Es el voluntarismo honor individual una variable dependiente de otra u otras personas? Como el umbral de la identidad, es decir, antes mucho antes de la inexactitud probable de tercero para la medición de índices de audiencia muy personales y también por su forma de elección auto-mal es pre errores por proxy, tanto más si la información, comunicación o conocimiento se impregnan con un ácido rencor del árbitro.



























copiando del álbun de belén; museos

copiando del álbun de belén; museos
mario. judith. jimena y belén, ¿año 2008?

imagina un mundo sin zonceras

imagina un mundo sin zonceras
imagina un mundo sin egoísmo

copiando del álbum de belén; casa blanca

copiando del álbum de belén; casa blanca
ellla y sus compeñeras del nación, más que un par de potras

juan cruz y mario paz III (junior)

juan cruz y mario paz III (junior)
navegadores custodios; fútbol

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Inca Paz también puede ser este ¿no?, de mi vida si te interesa preguntá, y sino todo bien

candela y jimena

candela y jimena
chico y grande; libros

mario y pinky

mario y pinky
a la edad que tienen hoy juan y mario

juan cruz en san lorenzo donde lo bautizaron

juan cruz en san lorenzo donde lo bautizaron
con maría jimena

historia argentina contemporánea


Fernando Peña
29.03.2008
Cristina, mucho gusto. Mi nombre es Fernando Peña, soy actor, tengo 45 años y soy uruguayo. Peco de inocente si pienso que usted no me conoce, pero como realmente no lo sé, porque no me cabe duda que debe de estar muy ocupada últimamente trabajando para que este país salga adelante, cometo la formalidad de presentarme. Siempre pienso lo difícil que debe ser manejar un país... Yo seguramente trabajo menos de la mitad que usted y a veces me encuentro aturdido por el estrés y los problemas. Tengo un puñado de empleados, todos me facturan y yo pago IVA, le aclaro por las dudas, y eso a veces no me deja dormir porque ellos están a mi cargo. ¡Me imagino usted! Tantos millones de personas a su cargo, ¡qué lío, qué hastío! La verdad es que no me gustaría estar en sus zapatos. Aunque le confieso que me encanta travestirme, amo los tacos y algunos de sus zapatos son hermosísimos. La felicito por su gusto al vestirse.Mi vida transcurre de una manera bastante normal: trabajo en una radio de siete a diez de la mañana, después generalmente duermo hasta la una y almuerzo en mi casa. Tengo una empleada llamada María, que está conmigo hace quince años y me cocina casero y riquísimo, aunque veces por cuestiones laborales almuerzo afuera. Algunos días se me hacen más pesados porque tengo notas gráficas o televisivas o ensayos, pruebas de ropa, estudio el guión o preparo el programa para el día siguiente, pero por lo general no tengo una vida demasiado agitada. Mi celular suena mucho menos que el suyo, y todavía por suerte tengo uno solo. Pero le quiero contar algo que ocurrió el miércoles pasado. Es que desde entonces mi celular no deja de sonar: Telefe, Canal 13, Canal 26, diarios, revistas, Télam… De pronto todos quieren hablar conmigo. Siempre quieren hablar conmigo cuando soy nota, y soy nota cuando me pasa algo feo, algo malo. Cuando estoy por estrenar una obra de teatro –mañana, por ejemplo– nadie llama. Para eso nadie llama. Llaman cuando estoy por morirme, cuando hago algún “escándalo” o, en este caso, cuando fui palangana para los vómitos de Luis D’Elía. Es que D’Elía se siente mal. Se siente mal porque no es coherente, se siente mal porque no tiene paz. Alguien que verbaliza que quiere matar a todos los blancos, a todos los rubios, a todos los que viven donde él no vive, a todos lo que tienen plata, no puede tener paz, o tiene la paz de Mengele.Le cuento que todo empezó cuando llamé a la casa de D’Elía el miércoles porque quería hablar tranquilo con él por los episodios del martes: el golpe que le pegó a un señor en la plaza. Me atendió su hijo, aparentemente Luis no estaba. Le pregunté sencillamente qué le había parecido lo que pasó. Balbuceó cosas sin contenido ni compromiso y cortó. Al día siguiente insistí, ya que me parecía justo que se descargara el propio Luis. Me saludó con un “¿qué hacés, sorete?” y empezó a descomponerse y a vomitar, pobre Luis, no paraba de vomitar. ¡Vomitó tanto que pensé que se iba a morir! Estaba realmente muy mal, muy descompuesto. Le quise recordar el día en el que en el cine Metro, cuando Lanata presentó su película Deuda, él me quiso dar la mano y fui yo quien se negó. Me negué, Cristina, porque yo no le doy la mano a gente que no está bien parada, no es mi estilo. Para mí, no estar bien parado es no ser consecuente, no ser fiel. Acepto contradicciones, acepto enojos, peleas, puteadas, pero no tolero a las personas que se cruzan de vereda por algunos pesos. No comparto las ganas de matar. El odio profundo y arraigado tampoco. Las ganas de desunir, de embarullar y de confundir a la gente tampoco. Cuando me cortó diciéndome: “Chau, querido…”, enseguida empezaron los llamados, primero de mis amigos que me advertían que me iban a mandar a matar, que yo estaba loco, que cómo me iba a meter con ese tipo que está tan cerca de los Kirchner, que D’Elía tiene muuuucho poder, que es tremendamente peligroso. Entonces, por las dudas hablé con mi abogado. ¡Mi abogado me contestó que no había nada qué hacer porque el jefe de D’Elía es el ministro del Interior! Entonces sentí un poco de miedo. ¿Es así Cristina? Tranquilíceme y dígame que no, que Luis no trabaja para usted o para algún ministro. Pero, aun siendo así, mi miedo no es que D’Elía me mate, Cristina; mi miedo se basa en que lo anterior sea verdad. ¿Puede ser verdad que este hombre esté empleado para reprimir y contramarchar? ¿Para patotear? ¿Puede ser verdad? Ése es mi verdadero miedo. De todos modos lo dudo.Yo soy actor, no político ni periodista, y a veces, aunque no parezca, soy bastante ingenuo y estoy bastante desinformado. Toda la gente que me rodea, incluidos mis oyentes, que no son pocos, me dicen que sí, que es así. Eso me aterra. Vivir en un país de locos, de incoherentes, de patoteros. Me aterra estar en manos de retorcidos maquiavélicos que callan a los que opinamos diferente. Me aterra el subdesarrollo intelectual, el manejo sucio, la falta de democracia, eso me aterra Cristina. De todos modos, le repito, lo dudo.Pero por las dudas le pido que tenga usted mucho cuidado con este señor que odia a los que tienen plata, a los que tienen auto, a los blancos, a los que viven en zona norte. Cuídese usted también, le pido por favor, usted tiene plata, es blanca, tiene auto y vive en Olivos. A ver si este señor cambia de idea como es su costumbre y se le viene encima. Yo que usted me alejaría de él, no lo tendría sentado atrás en sus actos, ni me reuniría tan seguido con él. De todas maneras, usted sabe lo que hace, no tengo dudas. No pierdo las esperanzas, quiero creer que vivo en un país serio donde se respeta al ciudadano y no se lo corre con otros ciudadanos a sueldo; quiero creer que el dinero se está usando bien, que lo del campo se va a solucionar, que podré volver a ir a Córdoba, a Entre Ríos, a cualquier provincia en auto, en avión, a mi país, el Uruguay… por tierra algún día también.Quiero creer que pronto la Argentina, además de los cuatro climas, Fangio, Maradona y Monzón, va a ser una tierra fértil, el granero del mundo que alguna vez supo ser, que funcionará todo como corresponde, que se podrá sacar un DNI y un pasaporte en menos de un mes, que tendremos una policía seria y responsable, que habrá educación, salud, piripipí piripipí piripipí, y todo lo que usted ya sabe que necesita un país serio. No me cabe duda de que usted lo logrará. También quiero creer que la gente, incluso mis oyentes, hablan pavadas y que Luis D’Elía es un señor apasionado, sanguíneo, al que a veces, como dijo en C5N, se le suelta la cadena. Esa nota la vio, ¿no? Quiero creer, Cristina, que Luis es solamente un loco lindo que a veces se va de boca como todos. Quiero creer que es tan justiciero que en su afán por imponer justicia social se desborda y se desboca. Quiero creer que nunca va a matar a alguien y que es un buen hombre. Quiero creer que ni usted ni nadie le pagan un centavo. Quiero creer que usted le perdona todo porque le tiene estima. Quiero creer que somos latinos y por eso un tanto irreverentes, a veces también agresivos y autoritarios. Quiero creer que D’Elía no me odia y que, la próxima vez que me lo cruce en un cine o donde sea, me haya demostrado que es un hombre coherente, trabajador decente con sueldo en blanco y buenas intenciones.Cuando todo eso suceda, le daré la mano a D’Elía y gritaré: “Viva Cristina”… Cuántas ganas tengo de que todo eso suceda. ¿Estaré pecando de inocente e ingenuo otra vez? Espero que no. La saluda cordialmente,Fernando Peña

mario y pinky

mario y pinky
juan y mario

Inca Paz puede ser éste que nunca pertenecería a carta abierta

Inca Paz puede ser éste que nunca pertenecería a carta abierta
bien abierta, de tipos cerrados muy cerrados

para la memoria y la libertad - ni una palabra más

Es habitual en los últimos tiempos encontrarse con intelectuales y artistas (y también con periodistas)que se dicen cansados de un periodismo crítico de los Kirchner. "Todos se han puesto de acuerdo para hablar mal del Gobierno", se escuchó decir hace poco a un reconocido escritor argentino. ¿Por qué no se cansaron cuando los periodistas criticábamos a Carlos Menem, a Fernando de la Rúa, a Eduardo Duhalde y hasta a Raúl Alfonsín mismo, aunque en este último caso prevaleció siempre, es cierto, el natural cuidado de una democracia recién nacida? En realidad, aquellos fatigados confunden cansancio con coincidencia. Ellos están -y es su derecho- muy cerca del discurso del kirchnerismo, aun cuando les sea difícil unir discurso y realidad, a veces tan divorciados.
El problema no pasaría de ser un duelo inconcluso entre extenuados y resistentes si la solución que se ofrece no fuera extremadamente peligrosa. Lo que agota, dicen, es la opinión.
El periodismo debería limitarse a ser un transportador de informaciones asépticas y un comunicador de posiciones antagónicas con preponderancia de las oficiales, porque el Gobierno tiene la responsabilidad de conducir la nación política. Eso es lo que proponen. En castellano simple y directo: lo que buscan es un periodismo pasteurizado, integrado por mecanógrafos o relatores que deberían limitarse a contar una realidad compleja, impetuosa y cambiante. Imposible de digerir fácilmente, por lo tanto, para el ciudadano preocupado por las cosas rutinarias de su vida.
La primera contradicción surge cuando ninguno de aquellos fatigados alude a las opiniones que florecen en los huertos del kirchnerismo. Ministros, legisladores, periodistas amigos y hasta la Presidenta suelen opinar (¡y cómo!) sobre todo lo que les es adverso. Es, entonces, la opinión del periodismo independiente (sí, independiente) lo que cansa y estaría de más.
Resulta, sin embargo, que no hay una fórmula verdadera para el periodismo que no incluya su función crítica del poder. Un periodismo acrítico, esterilizado y descolorido no tiene ninguna razón para existir. Su posición crítica debe incluir, desde ya, a la oposición, en tanto ésta forma parte del poder actual o del poder futuro. Pero su función crítica (desde la opinión o desde la investigación) debe abarcar sobre todo al poder que gobierna la contingencia. La publicidad de los actos de gobierno corre por cuenta de los funcionarios y de los enormes recursos estatales para promocionarlos, distribuidos arbitrariamente en el caso que nos ocupa.
Un medio periodístico debe incluir también en sus páginas o en sus espacios la opinión (con la condición de que sea seria y responsable) de los que no coinciden con el punto de vista de ese medio de comunicación. La Nacion lo ha hecho hasta cuando se dio el debate por la nueva ley de medios: convocó a sus páginas a políticos e intelectuales que no coincidían con la posición editorial del diario. Es la obligación del periodismo. Pero el medio periodístico y los periodistas cuentan con el derecho ?y el deber? de tener una opinión determinada sobre los sucesos de la vida pública del país. ¿Acaso no dejaría de merecer el necesario respeto (y hasta carecería de la conveniente previsibilidad) un medio al que le diera lo mismo el derecho o el revés de las cosas, las políticas de un color o de otro y las buenas o las malas formas?
La opinión es libre, como dijo hace poco Cristina Kirchner, en una de sus pocas oraciones de aceptación de la libertad del otro. Con todo, el periodismo tiene algunos deberes junto con aquellos derechos. La información que sustenta su opinión debe ser veraz. El chequeo de las versiones es una práctica que jamás debe olvidarse y nunca debe prestarse a las detestables operaciones de prensa que el kirchnerismo frecuenta con más constancia que ningún otro grupo político. Honestidad personal y honestidad intelectual son los atributos que deben marcar el límite moral del periodismo. Es necesario también el cultivo de la coherencia: no hay nada más desconcertante para un lector desprevenido que un medio o un periodista que cambian sus opiniones en todas las esquinas de la vida.
En medio de ese debate, es perceptible la existencia de periodistas jóvenes que se preguntan si es conveniente coincidir con las opiniones de "la empresa" periodística en la que trabajan. Esto es nuevo y es viejo, al mismo tiempo. El kirchnerismo tiene una habilidad enorme para resucitar viejos fantasmas del pasado. Ese enredo muy antiguo entre la libertad de prensa y la "libertad de empresa" había dejado de existir hace más de treinta años.
Hagamos un ejercicio. ¿Por qué no cambiamos las preguntas? ¿Qué tiene de raro, por ejemplo, que un periodista concuerde con el medio en el que trabaja? ¿Acaso las empresas periodísticas no existen también gracias a la composición del buen periodismo? ¿Por qué esas empresas deberían tener, en los casos más notables al menos, intereses contradictorios con las mejores prácticas de la profesión? ¿No es preferible para este oficio de libertarios estar de acuerdo con un diario, donde pasamos parte de nuestras vidas, antes que con un gobierno de políticos pasteleros y fugaces?
La Argentina, en efecto, habita en el pasado. Ningún debate de los últimos meses ha llegado siquiera a la década del 80. ¿Qué hacía tal o cual periodista en 1976, 1977 o 1978? No hacíamos nada. Vivíamos bajo una dictadura y cada uno vivía de lo que podía y como podía. Sólo los que vivieron bajo el peso aplastante y gris de una dictadura saben que no había muchas más cosas para defender que pequeñas cuotas de dignidad. Hagamos de nuevo preguntas desde otro lugar: ¿acaso los únicos periodistas dignos fueron los exiliados o los que se comprometieron firmemente con organizaciones insurgentes de la década del 70? Esa sería, si fuera así, una conclusión injusta, discriminatoria e inaceptable. Otra cosa tan inaceptable como aquélla es la decisión política del Gobierno de cambiar la historia de cada uno de los que considera adversarios.
La síntesis ha llegado a la farsa: o se está con Kirchner o se estuvo con la dictadura.
Feas armas se han usado en los últimos tiempos. A muchos periodistas no les gusta ser protagonistas de esas emisiones de maldad que se emiten por canales oficiales o paraoficiales.
Es cierto que es difícil cuando la vida cambia y ya no se puede caminar con tranquilidad por la calle porque se está a la espera de una agresión verbal o física. Y es más arduo aún aguantar en silencio la insistencia de la calumnia y de la falsedad, repetida hasta el cansancio por los portavoces oficiosos del Gobierno.
Lo único bueno de todo esto es que no hay atajos: habrá que armarse de paciencia, sin resignar los derechos ni los deberes del periodismo. Asumamos también el riesgo de solitarios que corremos en la vía pública. Un periodista con custodia a su alrededor abandona automáticamente su condición de periodista. Dejemos las aparatosas custodias para que se pavoneen los funcionarios y algunos políticos.
Una vez le pregunté a Néstor Kirchner, en esos diálogos de los columnistas con los presidentes que son mitad reservados y mitad públicos, en tiempos en que los periodistas éramos como somos ahora y el ex presidente no había desenfundado un revólver permanente contra nosotros (sólo lo hacía de vez en cuando), cómo imaginaba su destino después del poder. No estaba preparado para esa pregunta. Miró el techo, demoró la respuesta y, al cabo de unos segundos largos como la eternidad, contestó: "Quisiera poder caminar tranquilo por la calle y que la gente común me saludara con un «buen día, doctor». No quiero más que eso". Tal vez dijo sólo lo que él creía que el periodista quería escuchar, como acostumbraba hacerlo, pero si entonces fue sincero ha decidido ahora llevarse por delante aquel proyecto, hasta incinerar su propia ilusión.
© LA NACION

noticias de babel

cuando los hombres dejan de entenderse sobrevienen las guerras



BBC
La última persona que hablaba la lengua Bo en las islas indias de Andamán, murió a la edad de 85 años, dijo a BBC una lingüista.
La profesora Anvita Abbi aseguró que la muerte de la señora Boa Sr es un hecho de importancia porque uno de las lenguas más antiguas había llegado a su fin.
Agregó que India perdió una "irremplazable" parte de su herencia cultural.
Los dialectos que se hablan en las islas Andamán se cree que se originaron en África.
Algunas tienen incluso 70.000 años de antigüedad.
Las islas son llamadas con frecuencia "el sueño de los antropólogos", ya que son una de las zonas del mundo con mayor diversidad lingüística.
Se acabó
La profesora Abbi –directora del portal en internet "Vanishing Voices of the Great Andamanese"- explicó: "Tras la muerte de sus padres, hace treinta o cuarenta años, Boa era la última persona que lo podía hablar".
Agregó que "estaba casi siempre sola y tuvo que aprender una versión de hindi que se habla en las islas para poder comunicarse con otra gente".
"Sin embargo, siempre tuvo muy buen sentido del humor… su sonrisa era muy fresca y sus carcajadas eran contagiosas".
La lingüista dijo que la muerte de Boa Sr es una pérdida para los científicos que quieren investigar más acerca de los orígenes de las lenguas antiguas, ya que perdieron una pieza vital del rompecabezas.
Hay una creencia general de que los idiomas que se hablan en las islas Andaman pudieran ser los últimos representantes de las lenguas que se hablaron en tiempos pre-neolíticos
Profesora Anvita Abbi
"Hay una creencia general de que los dialectos que se hablan en las Islas Andamán pudieran ser los últimos representantes de las lenguas que se hablaron en tiempos pre-neolíticos". Dijo la profesora Abbi.
"Se piensa que en las Islas Andaman estaban nuestros primeros ancestros", agregó.
El caso de Boa Sr fue destacado también por el grupo Survival International (SI).
"La extinción de la lengua Bo significa que una parte única de la sociedad es ahora sólo una memoria", dijo el director de SI, Stephen Corry.
"Enfermedades importadas"
La profesora Abbi dijo que dos dialectos de las Islas Andamán han muerto en los últimos tres meses y que esto es un tema que causa gran inquietud.
Los académicos han dividido a las tribus de Andamán en cuatro grandes grupos: los Gran Andamaneses, los Jarawa, los Onge, y los Sentineleses.

La profesora Anvita Abbi se hizo muy amiga de Boa Sr.
La profesora Abbi explicó que la mayoría de los habitantes de las Islas Andamán –con excepción de los Sentineleses-, han estado en contacto con indígenas "de tierra firme" y que por eso sufren "enfermedades importadas".
Dijo que los integrantes del grupo de los Gran Andamaneses son alrededor de 50, la mayoría niños, y que viven en la isla Strait, cerca de la capital, Port Blair.
Boa Sr formaba parte de esta comunidad, que está conformada por varias subtribus, en donde se hablan al menos cuatro lenguas.
Los Jarawa cuentan con alrededor de 250 miembros, y viven en la selva, en el centro de Andamán.
La comunidad de los Onge se cree que tiene no más de varios cientos.
"Nunca se ha establecido ningún contacto humano con los Sentineleses, y hasta el día de hoy, se han resistido a cualquier intervención foránea", agregó la profesora.
El destino de los Gran Andamaneses es lo que más preocupa a los académicos, porque los miembros de esa tribu dependen del gobierno indio para sus alimentos y alojamiento, y el alcohol se consume en grandes cantidades

brigid triple, poesía

brigid triple, poesía
belleza y no tanto

la canción desesperada

en pedo querido neruda, en pedo

La canción desesperadaEmerge tu recuerdo de la noche en que estoy. El río anuda al mar su lamento obstinado. Abandonado como los muelles en el alba. Es la hora de partir, oh abandonado! Sobre mi corazón llueven frías corolas. Oh sentina de escombros, feroz cueva de náufragos! En ti se acumularon las guerras y los vuelos. De ti alzaron las alas los pájaros del canto. Todo te lo tragaste, como la lejanía. Como el mar, como el tiempo. Todo en ti fue naufragio! Era la alegre hora del asalto y el beso. La hora del estupor que ardía como un faro. Ansiedad de piloto, furia de buzo ciego, turbia embriaguez de amor, todo en ti fue naufragio! En la infancia de niebla mi alma alada y herida. Descubridor perdido, todo en ti fue naufragio! Te ceñiste al dolor, te agarraste al deseo. Te tumbó la tristeza, todo en ti fue naufragio! Hice retroceder la muralla de sombra, anduve más allá del deseo y del acto. Oh carne, carne mía, mujer que amé y perdí, a ti en esta hora húmeda, evoco y hago canto. Como un vaso albergaste la infinita ternura, y el infinito olvido te trizó como a un vaso. Era la negra, negra soledad de las islas, y allí, mujer de amor, me acogieron tus brazos. Era la sed y el hambre, y tú fuiste la fruta. Era el duelo y las ruinas, y tú fuiste el milagro. Ah mujer, no sé cómo pudiste contenerme en la tierra de tu alma, y en la cruz de tus brazos! Mi deseo de ti fue el más terrible y corto, el más revuelto y ebrio, el más tirante y ávido. Cementerio de besos, aún hay fuego en tus tumbas, aún los racimos arden picoteados de pájaros. Oh la boca mordida, oh los besados miembros, oh los hambrientos dientes, oh los cuerpos trenzados. Oh la cópula loca de esperanza y esfuerzo en que nos anudamos y nos desesperamos. Y la ternura, leve como el agua y la harina. Y la palabra apenas comenzada en los labios. Ese fue mi destino y en él viajó mi anhelo, y en él cayó mi anhelo, todo en ti fue naufragio! Oh, sentina de escombros, en ti todo caía, qué dolor no exprimiste, qué olas no te ahogaron! De tumbo en tumbo aún llameaste y cantaste. De pie como un marino en la proa de un barco. Aún floreciste en cantos, aún rompiste en corrientes. Oh sentina de escombros, pozo abierto y amargo. Pálido buzo ciego, desventurado hondero, descubridor perdido, todo en ti fue naufragio! Es la hora de partir, la dura y fría hora que la noche sujeta a todo horario. El cinturón ruidoso del mar ciñe la costa. Surgen frías estrellas, emigran negros pájaros. Abandonado como los muelles en el alba. Sólo la sombra trémula se retuerce en mis manos. Ah más allá de todo. Ah más allá de todo. Es la hora de partir. Oh abandonado!
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aunque nunca llegue, parís, aunque nunca mire tus calles

aunque nunca llegue, parís, aunque nunca mire tus calles
buscando la excelencia, pero la verdadera no la que los que ya sabemos hacen todo trucho

juan cruz y mario paz III (junior)

juan cruz y mario paz III (junior)
custodios de aghartapaz; jugando

juan cruz en el pueblo donde lo bautizaron, con javier y candela

juan cruz en el pueblo donde lo bautizaron, con javier y candela
en san lorenzo hoy

candela y maría belén; blogs

candela y maría belén; blogs
cuarta y quinta generación desde que podemos saber algo de dónde venimos

candela y maría belén y mariano

candela y maría belén y mariano
grande y chico; como el marqués de SADE

juan cruz en la quebrada de san lorenzo

juan cruz en la quebrada de san lorenzo
pago donde nací es la mejor querencia

historias de camas

de diament

MIAMI.- Admitámoslo: si Hollywood hubiera tomado la historia del gobernador Mark Sanford y la hubiera llevado a la pantalla con Richard Gere y Julia Roberts, la gente habría necesitado una toalla para secarse las lágrimas.
¿Qué puede ser más conmovedor que una historia de amor alocado? El adusto gobernador de un estado igualmente adusto, casado con una mujer a cuya fortuna le debe su carrera, con cuatro hijos que puestos en fila trazan una perfecta diagonal, inesperadamente flechado por una porteña de ojos verdes.
¿Cómo contener el palpitar del corazón mientras escucha, como un murmullo distante, el parloteo de sus asesores? ¿Cómo desprenderse de las imágenes que obstinadamente se apoderan de su mente, desplazando cualquier otro pensamiento? Ella es el amor imposible, sí, pero también es el amor.
¿Quién puede sobreponerse al intenso aguijoneo de los recuerdos, a la memoria de la tierna sensación de sus besos, de la sensual curva de sus caderas, al contorno de sus pechos resplandeciendo en la penumbra?
¿Qué espíritu romántico podría dejar de admirar la osadía del gobernador de levantarse un buen día del sillón de su despacho, de la mesa cubierta de anteproyectos y decretos a la firma, de pliegos de presupuestos deficitarios e informes sobre seguridad interior, y dejarlo todo para correr hacia ella?
No le dijo nada a nadie. Nadie supo dónde estaba. Uno de sus asesores insinúa que el gobernador, agobiado por la presión de su trabajo, se ha ido a escalar las montañas Apalaches, como solía hacerlo cuando era chico.
Pero él está en otro lado, volando hacia una Buenos Aires invernal, sucia, intoxicada de debates sobre las inminentes elecciones.
Nada de esto lo amilana porque sabe que al final de ese purgatorio están las calles arboladas del barrio de Palermo, la puerta de cristal, la escultura en el vestíbulo de entrada, el portero somnoliento que baldea la vereda, el ascensor demasiado moroso y, finalmente, ella.
La cama retiene aún el calor de la noche y él se pierde en sus brazos, en sus labios, en el revuelo de su pelo y en las medias palabras que se emiten en el ardor de la pasión.
El amor, aunque efímero, ha triunfado. Mañana no importa. No importan la pretenciosa moralina de los periodistas, los desdeñosos comentarios de políticos rivales, el escándalo, la traición, el precipicio que se abre a sus pies. Nada de eso importa. El corazón ha triunfado.
Lástima que la realidad no tenga la armonía de la ficción literaria. Lástima que haya personajes tan perversos que sean capaces de apoderarse de un intercambio íntimo de correos electrónicos entre amigos y pasárselos anónimamente a la prensa. Lástima que hubo un periodista advertido esperándolo en el aeropuerto de Atlanta. Fin del encantamiento
Pero él no tiene derecho a lamentarse. Después de todo, cayó en el mismo error, debe reconocerlo, cuando cuestionó la "legitimidad moral" de Bill Clinton por su affaire con Mónica Lewinsky y reclamó su juicio político, o cuando criticó a un colega con una historia similar a la suya, diciendo que "violó el juramento a su esposa".
En este punto es donde Richard Gere desaparece y Mark Sanford retoma su rol. Aquí es donde el encantamiento se esfuma y lo que reaparece es la descarada institución del arrepentimiento político.
El gobernador hizo su mea culpa , como antes de él hicieron otros políticos. Las mismas palabras, la misma admisión de haber traicionado a todo el mundo. A su mujer, a sus hijos, a sus amigos, al electorado. Las conferencias de prensa son el confesionario de los funcionarios pecadores. Todo fue un desatino, una pérdida temporaria de la razón. El amor no importa. El corazón es un embaucador. Ahora lo comprende. Lo que importa es la misión, la fe religiosa, los deberes del funcionario.
Hubo otras desprolijidades, es cierto. El viaje anterior a la Argentina pagado con fondos públicos, el abandono de su función, el engaño respecto de su paradero. No exactamente la clase de comportamiento que uno esperaría de Richard Gere. Pero él se propone enmendar las faltas, reponer el dinero, ganar la absolución de su esposa, recuperar la confianza del público.
¿Qué pensará María, a solas en el departamento de Palermo, mirando a su amigo pedir perdón por televisión? ¿Pensará también que al amor es lo de menos?

antecedentes para la fundación de agharta

ADN, derechos y ácido.
No hay que saber mucho de derechos para darse cuenta que la intimidad es la intimidad y que ninguna ley modificará desde afuera semejante entidad de la condición humana, y que los que no lo tengan claro pueden cometer errores como privar de la libertad a alguien por su aspecto de hippie en desgracia como era para cualquier argentino en la década esa. La intimidad es la intimidad, y no está bueno retrotraer iniciativas parecidas a las de los setenta y obligar a alguien en forma directa o indirecta para averiguar su ADN por caso, porque si no hay lesión a la libertad del otro la intimidad es integridad y la estatura de la propia probidad es primero una decisión individual y privativa no de un tercero por más que se interponga una loable causa, la intimidad es dignidad y la contrición la vergüenza y la sobriedad son instintos independientes y se encuentran en una frecuencia diferente a la apreciación por parte de un tercero del propio honor o del destructivo deshonor, la intimidad es identidad, y en su forma de elección equivocarse por cuenta propia también es anterior a cometer errores por interpósitas personas, más aún más si la averiguación está impregnada de algún ácido rencor del tercero en discordia.